La última e inesperada derrota del Joventut, en el Olímpico de Badalona frente al Estudiantes, ha reducido las opciones del Joventut a meterse en los play off. Sus opciones no sólo pasan por ganar en Sevilla por más de nueve puntos, sino que, además, en la última jornada deberían vencer a un insaciable Valencia Básket, que ni con la Eurocup y el segundo puesto de la fase regular en el bolsillo ha levantado el pie del acelerador.

Quizá por ello el discurso que lanzan desde la Penya es algo pesimista con frases como "no tenemos nada que perder", pronunciada por Albert Miralles esta semana. Pero también puede ser una táctica para generar confianza en el conjunto hispalense, que bien haría en no confiarse ante un rival que apura sus opciones.

"Afrontamos el choque con ganas, pero sabiendo que es complicado. Tenemos poco que perder ya. Iremos a ganar, claro, y si podemos recuperar el average, mejor, aunque para eso debemos mejorar en defensa y volver a tener esa concentración que nos permitía dejar al contrario en menos de 70 puntos", señaló el veterano pívot.

También el técnico verdinegro, Salva Maldonado, elogió al equipo hispalense destacando lo importante que es para la ACB que "en la jornada 33 haya dos conjuntos jóvenes y de presupuestos reducidos peleando por entrar en el play off". "El Cajasol llega con mucha confianza y defensivamente está jugand a un gran nivel imponiendo su físico. Será un buen partido entre dos equipos, de los calificados como sorpresa, que llevan en la zona media-alta casi todo el campeonato", indicó el técnico, que añadió sobre el plantel de Aíto: "Combina la juventud con un grado de madurez perfecto, y además ha experimentado una gran progresión a nivel técnico-táctico". No en vano, el Cajasol es el tercer equipo, igualado con el Unicaja, que más ha mejorado a estas alturas respecto la temporada pasada, con seis triunfos más. Sólo mejoran sus números el Valencia (con ocho triunfos más) y Gipuzkoa (más siete).