El Barcelona y el Real Madrid disputan (19:00) el segundo partido de la final de la Liga Endesa 48 horas después del gran espectáculo ofrecido por ambos equipos en el duelo inaugural, con triunfo sobre la bocina (100-99) de los de Xavi Pascual, que quieren ir con un 2-0 a la capital de España, algo que quiere evitar su rival a toda costa.

La estadística no deja margen de error si se miran los casos en los que el Barcelona ganó el primer partido de una serie, fuera en cuartos, semifinal o final: siempre ha ganado. Son 45 ocasiones ya en que el cuadro azulgrana abrió con triunfo una eliminatoria y la cerró con victoria. Y en esta ocasión cuenta además con el factor pista a favor.

Sin embargo, el Real Madrid es un equipo capaz de levantarse, sobre todo si ajusta su defensa, ya que en ataque le sobran los argumentos. No en vano, el primer punto de la final pudo caer de su lado. La única duda para el duelo es la de Satotansky, que pidió el cambio en el primer enfrentamiento por molestias musculares.

España afronta ante Corea del Sur (12:30), la hora de la verdad en el Preolímpico de Nantes (Francia) porque el vencedor de este encuentro de cuartos de final obtendrá el pasaporte para los Juegos de Río.

Es el partido con el que el conjunto de Lucas Mondelo, campeón de Europa en 2013, subcampeón del mundo en 2014 y bronce continental en 2015, lleva soñando todo el año. Merecimientos le sobran, pero es ahora cuando se la juega en el examen final. España llega con una nota media muy alta, pero hay que rematar la faena ante una Corea que tiene como principal característica la versatilidad de todas sus jugadoras: todas tiran, todas corren, todas defienden y todas entran al rebote.