Haber ganado a la Juventus y al Tottenham no significa que el Benfica sea el favorito para la final de la Liga Europa que juega ante el Sevilla, dijo este viernes el entrenador encarnado, Jorge Jesús, quien garantizó soluciones para sus cinco bajas. "En una final no hay favoritos", sentenció Jesús durante una jornada abierta a los medios de comunicación organizada por la UEFA.

El entrenador aseguró también que hallará soluciones para suplir las importantes bajas de los argentinos Enzo Pérez y Eduardo Salvio, el serbio Lazar Markovic -los tres sancionados-, el serbio Ljubomir Fejsa y el portugués Sílvio -ambos lesionados-. "Con cinco jugadores (ausentes), las soluciones comienzan a ser menos, pero acredito en el trabajo que hemos desarrollado, tanto en el valor colectivo como en el individual", refirió.

Los medios Enzo y Fejsa, titulares habituales y claves para el funcionamiento del centro del campo, están considerados como las bajas más sensibles y, previsiblemente, serán los portugueses André Gomes, una joven promesa, y el experimentado Ruben Amorim sus sustitutos. "Conozco bien al Sevilla, pero todavía no analicé su valor. Vi varios partidos de la Liga y creo que será un equipo súper motivado", añadió el veterano entrenador, que a sus 59 años dirige por quinta temporada al Benfica, actual campeón luso.

Aseguró que espera "un adversario fuerte" que ha llegado a la decisión de un torneo por su calidad y restó valor a las siete finales europeas perdidas desde que el club ganase su segunda Copa de Europa en 1962. La leyenda atribuye esta sequía de títulos a la maldición de Béla Guttmann, técnico húngaro que predijo una larga sequía de trofeos continentales después de ganar, precisamente, la Copa de Europa de 1962. "No soy supersticioso. Creo en la labor de las personas y la calidad del trabajo. A veces, no siempre el mejor vence una final, pero también creo que podemos ser mejores que el Sevilla y ganar esta final", aclaró.

Para Jesús, "el Benfica está haciendo historia este ano", después de que el pasado año perdiese la final de la Liga Europa ante el Chelsea en el último minuto por un cabezazo del serbio Ivanovic. "Es la segunda vez (consecutiva) que vamos estar en una final como ésta. Ya sabemos lidiar mejor con la ansiedad", recalcó.