El empresario sevillano Rosauro Varo animó a un auditorio lleno de directivos a aprovechar los cambios de la nueva sociedad digital porque "el desarrollo tecnológico es imparable". Varo participó ayer como ponente en un desayuno-coloquio organizado por la Asociación de Directivos de Andalucía, Ceuta y Melilla (Adacem), patrocinado por Rotary Club Giralda Sevilla, celebrado en el Caixaforum de Sevilla.

Varo fue presentado por Rufino Parra y por Luis Miguel Martín Rubio, presidente y vicepresidente de Adacem, depués de que el director territorial para Andalucía Occidental de Caixabank, Rafael Herrador, diese la bienvenida a los asistentes y a conocer las instalaciones del Caixaforum. También intervino en nombe del Rotary Club Enrique Jiménez.

El ponente, en su conferencia Retos y oportunidades para la empresa en la era digital, recalcó cómo avanza el mundo con las aplicaciones móviles y cómo está afectando ya a todo lo que nos rodea. "Facilitarán la vida y los negocios ajustándose cada vez más a las necesidades y gustos de los clientes", afirmó Rosauro Varo, quien enumeró de posibles aplicaciones tecnológicas que darán a conocer muchos datos de interés, tanto para sectores como el agroalimentario o el turístico, de tanto peso en Andalucía.

Rosauro Varo alabó la gran vocación empresarial que, a su juicio, hay en Andalucía y explicitó que su empresa, el grupo GAT, tiene un presupuesto de 30 millones de euros en su actual plan estratégico para invertir en esta comunidad autónoma.

Al hacer un repaso a su trayectoria empresarial, desde que empezó muy joven en la hostelería nocturna en Sevilla, Varo se detuvo en la experiencia de éxito acumulada con Pepephone, que sin promociones ni publicidad, y sin tiendas propias, en 2015 se convirtió en el operador móvil virtual independiente más grande de España, con 480.000 clientes, 65 millones de facturación y cero deudas.

A pesar de ello, en abril de 2016 se llega a un acuerdo para la venta de Pepehone, y pese a las dudas que tuvo sobre si se cerraba la operación opina que acertó: "En los negocios es tan importante saber cuándo entrar como saber cuándo salir".