Andalucía guarda en su rico patrimonio cultural uno de sus mayores tesoros. Un tesoro que da lustre y, a la vez, representa un reclamo turístico de primer orden. La oferta de la comunidad presume de variedad y atractivo, y dentro de ella brilla un legado forjado por siglos de intensa historia y devenir de civilizaciones. Un año más, el turismo cultural se erige como una de las alternativas más demandadas por los visitantes que disfrutan de la región. Y es que cerca de uno de cada cuatro turistas, en concreto el 23%, eligió el destino en 2010 motivado por sus monumentos, edificios y museo. Esto supone una cifra aproximada de cinco millones de turistas, según una explotación específica realizada por la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía (ECTA).

Este informe confirma, una vez más, el peso y la relevancia del turismo cultural para Andalucía, que recibe una nota media de 7,3 sobre 10. En este sentido, destaca el gasto que genera. La inversión diaria de los visitantes culturales se estimó en unos 76,15 euros, superando en algo más de 15 al turista medio y ligeramente superior a la registrada el año anterior. Los turistas culturales extranjeros gastaron un euro más que los españoles de esta tipología. Asimismo, la restauración y el alojamiento continúan siendo las partidas a las que se destina la mayor parte del presupuesto. En total, el acervo cultural andaluz generó en 2010 unos ingresos en torno a los 1.900 millones de euros.

Por término medio, el turista cultural permaneció en el destino unos 4,1 días, estancia que es inferior en casi cinco jornadas a la registrada por el total de turistas. No obstante, aumentó respecto al año anterior en 0,3 días. La permanencia registrada por el turista cultural foráneo alcanzó los 6,5 días y duplicó la del español.

La cultura capta de forma mayoritaria a los turistas españoles, pero se incrementa el interés dentro de los mercados extranjeros. Atendiendo a la procedencia de estos turistas, el 56% dispone de su residencia habitual en España y un 44% en el extranjero. En comparación a 2009, se aprecia un incremento notable en la cuota de viajeros internacionales por su mejor evolución general frente al mercado nacional durante el año pasado. Dentro de los turistas españoles, un año más el principal emisor fue la propia Andalucía, seguida por la Comunidad de Madrid y Cataluña. Francia, Reino Unido, Italia y Alemania se consolidaron como los principales emisores de visitantes culturales extranjeros.

Otro aspecto que llama la atención es que durante su estancia en Andalucía, los turistas culturales, ya sean de procedencia nacional o extranjera, prefirieron casi en exclusiva los establecimientos hoteleros (hoteles, apartahoteles, hostales y pensiones) como tipología de alojamiento, un porcentaje de uso que supera en más de 20 puntos porcentuales a la media total de los turistas, que en 2010 se situó en el 69%. Cae, no obstante, la adquisición de paquetes turísticos. El turista cultural destaca por su independencia, pues prácticamente el 90% de los casos organiza su viaje de forma particular.

En este sentido, internet cumple un papel primordial. El 71,0% de los turistas culturales declararon haber utilizado este medio para consultar, reservar o comprar algún servicio turístico del viaje a la región, 8,7 puntos porcentuales más. Por mercados, el uso de la Red es más habitual entre los turistas extranjeros (79,5%) que entre los nacionales (67,5%).

El estudio pone de relieve que la visita a monumentos y museos es la principal actividad realizada por los turistas culturales en Andalucía, pues la lleva a cabo cerca del 80%. La observación de la naturaleza (39,2%) y la realización de compras (17,3%) le siguen como las siguientes actividades más frecuentadas.

El consejero de Cultura, Paulino Plata, puso en valor el pasado miércoles, después de celebrarse el Consejo de Gobierno de la Junta, la importancia de este segmento para la región, destacando al mismo tiempo que la Red de Espacios Culturales de Andalucía (RECA) ha recibido 14,9 millones de visitantes en los últimos tres años, de los cuales 11,2 millones de personas acudieron a los conjuntos monumentales de la región y el resto a los enclaves.