Los principales accionistas de Banco Popular han acudido a la ampliación de capital por 2.505 millones de euros anunciada por la entidad el pasado 26 de mayo y han renovado su compromiso con el banco, según fuentes del mercado, que señalaron ayer que en la parte minorista se ha superado "con creces" el 30% que se había establecido para este tramo.

Tras Allianz, que el mismo día que se anunció la operación comunicó que acudiría, los mexicanos Del Valle y la firma francesa Banque Federative du Credit Mutuel ofrecieron a Popular su compromiso de apoyar la ampliación. La entidad gala acude por el 3,92% de su participación, mientras que los mexicanos mantendrán una posición aproximada del 4%.

A marzo de 2016, el 53% del capital de Popular se encontraba en manos de accionistas internacionales no residentes en España. Más allá de Crédit Mutuel, los accionistas mexicanos y Allianz, la entidad cuenta con minoristas (29,26%), institucionales (46,79%) y la sindicatura de accionistas (9,85%), entre otros.

Tras conocerse los detalles de la ampliación, las agencias de calificación crediticia Moody's, S&P y Fitch confirmaron su rating sobre Popular, en los tres casos manteniéndolo en grado de especulación. Mientras que S&P y Fitch conservaron la perspectiva positiva, Moody's la elevó de estable a positiva. Entienden que la ampliación de capital del banco le permitirá reforzar su capacidad de absorción de pérdidas de cara a los retos que debe afrontar en relación a la calidad de sus activos.

A la posición de las agencias se han sumado los informes de casas como Caixabank, Mirabaud o Redburn, que aconsejan comprar acciones de la entidad y mejoran su precio objetivo.

Desde que se anunciara la ampliación, las acciones del Popular han perdido un 38,75% de su valor en bolsa, hasta los 1,443 euros. Los derechos negociados desde el 30 de mayo hasta ayer se han hundido un 22,36%, hasta los 0,125 euros.