Entrevistas

en campaña

-¿Qué ha hecho en estos cinco meses?

-Han sido cinco meses muy intensos en los que me he reunido con la patronal y sindicatos. La idea, desde el principio, ha sido hacer un plan de trabajo institucional para Huelva, muy enfocado en el empleo. Pero de esas reuniones han salido más cosas, como las infraestructuras y el medio ambiente. También me he reunido con la plataforma por las infraestructuras, la Cámara de Comercio o los jubilados retornados. Hice una batería de preguntas sobre la situación de la educación en Huelva, sobre todo la Infantil, y sobre la fusión de los hospitales. Pedimos también la comparecencia de Tejerina para que diera explicaciones sobre la aceptación del plan de Fertiberia para los fosfoyesos. Si estaba en funciones y, además, siendo alto cargo de Fertiberia, se tenía que haber mantenido al margen.

-¿Qué opina de ese plan?

-Está hecho para cumplir el papel, en este caso la condena de la Audiencia Nacional, y no ofrece la garantías ambientales necesarias. Se trata, al fin y al cabo, de cubrir con una capa de arena la balsa y plantar encima. Eso no regenera la zona y hay que pararlo cuanto antes. En el Ayuntamiento se ha creado una mesa para arreglar la situación y hay expertos de la UHU, que son independientes y que están haciendo un estudio sobre cómo regenerar la zona.

-¿Usted tuvo antes del 20-D algún cargo político?

-No, ni político ni público, es la primera vez que me presento a algo así y espero que no sea durante mucho tiempo. No sólo lo espero, sino que tenemos puesta la vacuna. Nuestros estatutos así lo determinan, no podemos estar en una lista de forma indefinida. Esto es para que no nos pase lo mismo que al resto de partidos, que hacen de la política su profesión y eso no es bueno para la sociedad.

-Cuando Monedero estuvo en Huelva dijo que usted representa a esa juventud que se ha preparado, que ha hecho los deberes y que, sin embargo, no lo tiene nada fácil. ¿Cuál es su trayectoria hasta ahora?

-Estudié Relaciones Laborales y Ciencias del Trabajo. Me fui a Madrid a hacer un máster en Estudios avanzados en trabajo y empleo, y luego hice el curso de Evaluación de políticas públicas. Llevo desde los 17 años trabajando. Me fui a un bar a trabajar y a mi madre se le caían dos lagrimones porque estaba en Bachillerato y ella decía que tenía que estar estudiando, pero mi familia es humilde y había que apoyar en casa. Ella tuvo que firmarme mi primer contrato. Desde entonces he trabajado en hostelería y en una tienda de ropa. Al acabar la carrera pude empezar a trabajar de lo mío. Hice prácticas en un sindicato, me quedé como voluntaria porque me apasionaba la defensa de los trabajadores y luego estuve un tiempo en una cooperativa de defensa laboral de autónomos y funcionariado. Más tarde impartí cursos de formación para desempleados sobre emprendimiento.

-¿Cuándo se sintió seducida por Podemos?

-El 15-M fue lo que me hizo despertar de forma más consciente. Estaba estudiando y en la carrera tuve un profesor de los que te hacen pensar. Empecé a comprar periódicos de forma obsesiva y tomé conciencia de lo que estaba pasando. Fue el momento en el que más casos de corrupción había y después surgió el 15-M. Cuando me fui a Madrid a hacer el máster empecé a moverme más y me fui a la primera asamblea que hubo para formar la ILP e la renta básica.

-¿Qué le diría a quienes critican que sea candidata por Huelva siendo de fuera?

-Es importante que la persona que vaya a representar sepa a quién está representando y, en ese sentido, yo no he dejado de hacer trabajo por y para Huelva, sobre todo para la mayoría social que son la mayoría de ciudadanos onubenses, andaluces y españoles. Es importante que tú sepas cuál es tu función, que sepas dónde está tu patria: si está en la gente que tiene el dinero en paraísos fiscales o si es la mayoría social. Yo no he venido aquí ha hacer de la política mi profesión, sino a luchar por la gente, por que este país les de un futuro a los jóvenes que se van, a nuestros abuelos que están perdiendo capacidad adquisitiva en las pensiones. -¿Qué le parece la expropiación municipal de las acciones del Recreativo?

-El fútbol es un deporte de masas, es del pueblo. El problema es que algunos han intentado hacer de ese deporte del pueblo, el deporte de sus beneficios. Y las consecuencias de eso es lo que le pasa al Recreativo. Algunos empresarios se han dedicado a lucrarse con el fútbol, en este caso Pablo Comas, que ha dejado en la ruina al equipo. Creo que ese es el gran problema del fútbol en este país. Hay que recuperar al Recreativo y al fútbol para que vuelva a ser un deporte de base, del pueblo, de la gente, y está claro que queremos que el Recreativo vuelva a ser del pueblo. Eso lo queremos todos.

-Pero ¿está de acuerdo con el paso que ha dado el Consistorio?

-Creo que hay que hacer lo que haya que hacer para que el Recreativo vuelva a ser del pueblo. Ahora bien, Participa Huelva preguntó en el Ayuntamiento cuáles son las garantías jurídicas y económicas que se tienen sobre el asunto. A eso el Ayuntamiento no contestó y es importante que se sepa, porque tenemos que tener en cuenta que el Ayuntamiento está muy endeudado y esas garantías se tienen que tener. Ahora bien, la apuesta es clara para que el Recreativo se siga manteniendo y que este deporte sea del pueblo, que no sea un deporte de ciertas personas que se lucran, lo dejan e bancarrota y después se van.

-El programa de Unidos Podemos tiene la lucha contra la violencia de género como uno de sus principales puntos del programa. ¿Cuáles son las propuestas concretas?

-La violencia machista es una lacra de esta sociedad que hay que eliminar ya. Ni los hombres son mejores que los mujeres, ni las mujeres son mejores que los hombres. Ningún hombre tiene más capacidad que la mujer, las mujeres somos capaces de hacer cosas enormes y somos el gran sostén de la familia, de este país. Lo hemos sido siempre pero indiscriminadamente se nos trata mal. Me da mucha rabia que para una mujer sea mucho más difícil todo, como el llegar a un puesto de trabajo en las mismas condiciones que un hombre. Tenemos propuestas que pusimos en marcha en estos cuatro meses de legislatura, como que no haga falta denuncia para que una mujer víctima de violencia machista vaya a una casa de acogida.

-¿Cómo se controla eso?

-Con los servicios sociales. Los ayuntamientos son los que más cerquita están de las mujeres y los ciudadanos y tienen un papel esencial. La ley Montoro ha hecho mucho daño a la igualdad. En la sierra hay centros de mujeres, pero no los que deberían y, en muchos casos, la asistencia psicológica es grupal y para hacerla individual te tienes que venir a Huelva.

-¿Usted ha sufrido algún tipo de discriminación?

-Es una cosa que las mujeres vemos día a día, no hace falta que sea solamente en el trabajo, que también. Se ve cuando pasas por la calle y un hombre te piropea. Yo paso por la calle igual que otra persona cualquiera y no hace falta que me vayan diciendo si llevo el pantalón más largo o más corto, o si me he maquillado mejor o si tengo mejor o peor cara ese día. Creo que la discriminación la vivimos día a día, en los anuncios, por ejemplo. Hay estudios que dicen que en el mismo puesto de trabajo una mujer cobra menos que un hombre, de hecho estamos en la provincia en la que las mujeres son peor pagadas de toda España.

Isabel Franco

Cabeza de lista al Congreso de Unidos Podemos