El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, asegura que tarde o temprano se sabrá el "cómo, el quién y el por qué" de la publicación de sus fotografías en El País con el condenado por narcotráfico Marcial Dorado y dice que sacar imágenes de 1995 en 2013 es "absurdo" y lleva "intención".

El jefe del Ejecutivo gallego asegura, en una entrevista que publicó ayer El Mundo, que esto obedece a un "ataque personal", no político, y que la filtración de estas instantáneas no proviene del PP -la oposición en Galicia le ha recomendado mirar en sus filas- porque "un compañero" no hace eso: "Descarto tajantemente que este ataque personal proceda de alguien de mi partido", apunta el dirigente gallego.

Feijóo explica que tiene "un contrato" con los gallegos tras el respaldo masivo en las últimas autonómicas, que vence en octubre de 2016 y avanza que lo cumplirá "por muchas infamias que se inventen o muchos obstáculos que haya en el camino". También confiesa que no puede responder por la honorabilidad de todas las personas con las que sale en imágenes, pero sí por la suya.

Núñez Feijóo tilda de "intolerable e inaceptable" el acoso contra los políticos del PP y de una de las últimas víctimas de los llamados escraches, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Cuenta que "no era la casa de la vicepresidenta, sino la de una madre con un bebé de catorce meses".

"A los políticos se les señala en las urnas, no se les acorrala en sus casas", apunta Núñez Feijóo al respecto, y opina que la inmensa mayoría convive con respeto, pero sí una minoría está dispuesta "a romperlo" para estos debe haber riesgos legales, y "si con los actuales instrumentos del Estado de Derecho no es posible hacerlo, hay que mejorarlos".

El presidente gallego además, preguntado por si el Rey debería abdicar en su hijo, apostilla que "no hay motivos".