El ex president a la fuga Carles Puigdemont está decidido a ser investido de cualquier manera sin pisar Cataluña, bien de manera telemática, a través de Skype, o bien por delegación, de tal forma que otro diputado presente en el pleno la lectura del discurso de Puigdemont, que mantiene su plan de regresar desde Bruselas una vez que se produjera la fantasmal toma de posesión como jefe del Govern.

Puigdemont cenó el martes en la capital belga con la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y llegaron a un primer acuerdo, que trascendió ayer, que garantiza que la legislatura dé comienzo, tal como ha formalizado el decreto publicado por el BOE, el 17 de enero, descartando así la posibilidad de que la mayoría independentista bloquee el pleno de constitución del Parlament.

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ERC asume que le corresponde a Puigdemont ser investido ya que le sacó 12.000 votos de diferencia el 21-D y ha encargado a sus servicios jurídicos la viabilidad de las propuestas para hacerlo a distancia , sin perjuicio de que los letrados del Parlament puedan hacer su propio análisis, por lo que este asunto, recalcan fuentes republicanas a Efe, no está cerrado.

Y no puede quedar cerrado porque si los partidos constitucionalistas recurren ante los tribunales cualquier lectura forzada del reglamento de la cámara, la investidura de Puigdemont puede quedar bloqueada.

En este sentido, la ex presidenta del PP catalán y actual miembro de la Mesa del Congreso, Alicia Sánchez-Camacho, aseguró ayer que no se puede producir una investidura telemática o vía Skype de Puigdemont, ya que, a su juicio, sería contraria a la Ley de Presidencia de la Generalitat y al propio reglamento del Parlamento catalán, por lo que su partido recurrirá si se da ese paso.

Lo certificó el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, quien advirtió de que los constitucionalistas tomarán las decisiones necesarias para impedir que los independentistas vuelvan a "retorcer" el reglamento del Parlament. En declaraciones en el Congreso, recalcó que en el parlamentarismo, "no solo por ley sino por espíritu", es "fundamental la presencia del candidato", para que exponga su propuesta de gobierno y que ésta pueda ser después votada.

Y "todo lo que no sea eso es una auténtica burla" y "un escándalo", además de una "huida hacia adelante" por parte de Puigdemont, añadió Maíllo.

Más clara está la futura Mesa de la Cámara catalana. JxCat y ERC han cerrado un pacto que establece una mayoría independentista, con dos miembros para cada uno de los dos partidos secesionistas, mientras que Ciudadanos tendrá otros dos y el PSC uno, quedando fuera los Comunes. Persiste la incógnita sobre quién estará al frente de la Mesa, pues la actual presidenta del Parlament, Carme Forcadell, aún debe comunicar si quiere repetir. Si lo rechazara, ERC debería proponer otro candidato.

La defensa del ex vicepresident Oriol Junqueras ha pedido al Tribunal Supremo que le permita salir de prisión para asistir al pleno de constitución del Parlament y al de investidura, de forma que su encarcelamiento no altere las "mayorías" de la Cámara.

La CUP se aferra a la vía unilateral.La formación anticapitalista reiteró ayer que solo apoyará a un Govern que apueste por la unilateralidad. El cabeza de lista en las últimas elecciones, Carles Riera (en la imagen), dijo que nunca permitirán "que se vuelva a la pantalla autonómica y constitucional".