El Rey sigue paso a paso la investigación de los atentados de Palma de Mallorca en contacto con los responsables de la Policía y la Guardia Civil en Baleares, a quienes ha manifestado que "esa banda de asesinos y facinerosos no conseguirá alterar la vida democrática española ni la normalidad en la isla". 

Don Juan Carlos se ha pronunciado en estos términos durante los contactos que mantiene desde el Palacio de Marivent con las máximas autoridades en Baleares de la Policía y la Guardia Civil, Bartolomé Campanero y Basilio Sánchez Rufo, sobre los artefactos explosivos que han estallado hoy en diferentes puntos de la capital mallorquina, según han informado a Efe fuentes de la Casa del Rey. 

El jefe del Estado se mantiene informado desde el primer momento por el Gobierno y las autoridades baleares sobre la evolución de los acontecimientos tras estos atentados, que no alterarán la agenda de Don Juan Carlos y del resto de la Familia Real en la isla. 

Las mismas fuentes han confirmado que hoy ha regresado a Mallorca la Reina, acompañada de las Infantas Elena y Cristina y los hijos de ambas, tras permanecer una semana en Grecia, donde llegó el pasado domingo para asistir al bautizo del quinto hijo de su sobrino Pablo. 

El retorno de Doña Sofía a Mallorca ha coincidido con el día en que su hijo, el Príncipe de Asturias, ha viajado a Quito para representar a España en la toma de posesión del reelegido presidente ecuatoriano Rafael Correa. 

Los Reyes llegaron a Mallorca el pasado sábado, tras una visita oficial a Madeira, dos días después del asesinato por ETA de dos guardias civiles en Palmanova, y tanto Don Juan Carlos como el Príncipe han participado en la 28 Copa del Rey de Vela, una competición deportiva que ha contado con la presencia cotidiana de Don Felipe. 

El jefe del Estado se desplazó el jueves al Palacio de la Almudaina, en el centro histórico de la ciudad, para recibir al presidente balear, a los hoteleros mallorquines y al alcalde de Calviá, municipio en el que ETA perpetró su crimen, y anoche presidió junto a los Príncipes de Asturias la ceremonia de entrega de los trofeos de la Copa de Vela, celebrada al pie de la catedral.