Durante su visita hoy a las obras financiadas durante esta legislatura con fondos de cooperación local en Dénia (Alicante), en que estuvo acompañada por la alcaldesa de la localidad, Francisca Viciano, Salgado indicó que no tiene "unas perspectivas muy optimistas" de que el debate durante la campaña no sea crispado.

  En este sentido, Salgado apuntó que "mantiene la esperanza de que la campaña se desarrolle en un clima exento de crispación", a pesar de que "el devenir de la legislatura no invita al optimismo en esta materia". Añadió que en esta legislatura el principal partido de la oposición -en referencia al Partido Popular- "ha entendido que el clima de crispación beneficiaba sus intereses" a pesar de que desde el Gobierno se entiende que "las cosas no son así y que los ciudadanos no desean" la crispación.

  En esta línea, la ministra expresó su deseo de que el debate de la campaña electoral "girara entorno a propuestas" dirigidas hacia "el entendimiento entre los grandes partidos en los temas básicos". Así como a "propuestas sociales, que nos diferencian mucho al PSOE y al PP y propuestas que vienen acompañadas siempre de proyectos en los temas de infraestructuras, tan relevantes siempre para esta comunicad".

  También pidió un debate sobre "propuestas de convivencia en todos los órdenes; de los españoles con los que no han nacido en España y han venido aquí a trabajar, de las personas entre ellas, con independencia de su ideología, de su orientación sexual y de sus opiniones religiosas". Además de propuestas de convivencia también "entre las comunidades autónomas".

  Por último, Salgado señaló que, a pesar de su deseo de centrar el debate en las propuestas, también se puede debatir "sobre el repaso de lo hecho durante las legislaturas, porque es el principal aval del Gobierno".