La Ertzaintza detuvo ayer al menos a cuatro personas en los altercados que se produjeron ayer en Bilbao tras la lectura de un comunicado de los convocantes de las dos manifestaciones que fueron consecutivamente prohibidas por la Consejería de Interior.

En los incidentes durante el Día Grande de las fiestas también resultó herido leve una agente de la Ertzaintza, según informó un portavoz de este cuerpo.

Los altercados comenzaron pasada la una del mediodía en la zona de Zabalburu, después de que los convocantes de la manifestación prohibida, que previamente la habían desconvocado, leyeran un comunicado denunciando la intensificación de los "ataques" contra la libertad de expresión registradas en las últimas semanas.

A continuación, varios cientos de personas que se habían congregado en la zona, comenzaron a discurrir por la Alameda de San Mamés coreando consignas. Algunos cruzaron contenedores por las calles adyacentes a medida que se acercaban hacia la Gran Vía bilbaína.

La Ertzaintza les cortó el paso y procedió a su dispersión con diversas cargas contra los alborotadores. Portavoces de los convocantes denunciaron, en declaraciones a los medios de comunicación, la "creciente violación de los derechos más básicos", que, a su entender, se está produciendo "en los últimos tiempos". En este sentido, afirmaron que "este verano la situación de está volviendo insostenible", con "los incidentes a cuenta de los fotos de presos", "la persecución" a la txupinera de Bilbao (es hermana de un miembro de ETA), "la negación" del derecho a manifestarse o "la represión de las ideas y de cualquier reivindicación legítima".

Los convocantes denunciaron que "derechos conquistados tras largos años de lucha contra el franquismo son pisoteados", mientras que "algunos partidos, sindicatos y agentes sociales miran para otro lado, ignorando la gravedad de lo que está sucediendo", y lo consideraron "una auténtica caza de brujas". Por ello, pidieron la implicación de "todos aquellos que están a favor de las libertades en Euskal Herria".

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz rechazó la petición de Dignidad y Justicia de prohibir dos actos convocados por la txosna de la comparsa Komantxe en las fiestas de la capital vizcaína, pero ordenó a la Ertzaintza que vigilara el desarrollo de las convocatorias para evitar la comisión de un posible delito de enaltecimiento del terrorismo, informaron fuentes jurídicas.

Según precisaron las mismas fuentes, el magistrado adoptó esta decisión atendiendo al informe de la Fiscalía, que tampoco consideró procedente la suspensión de los actos. El colectivo de víctimas presidido por Daniel Portero solicitó ayer la prohibición al entender que estos actos constituyen un delito de enaltecimiento del terrorismo y de humillación a las víctimas.

El Movimiento pro Amnistía no ha comunicado al Departamento de Interior el acto que tiene previsto celebrar hoy en Bilbao a las doce del mediodía en favor de "los refugiados políticos vascos", por lo que el Gobierno vasco considera que es "ilegal" y establecerá un dispositivo de prevención en torno a El Arenal bilbaíno.