David Eloy Rodríguez es un creador incansable. Mil proyectos a la vez conviven en su cabeza: de la poesía escénica a la producción editorial, lo que supone todo un compendio de agitación cultural muy acorde con los principios del colectivo La Palabra Itinerante, al que pertenece.

Aún está reciente la publicación de su último poemario, Asombros, y participa en dos antologías: Poesía española 2008 (Alhambra Publishing, Bélgica, 2007) y Aquí y ahora (Y Griega, 2008), que se presenta en la Feria del Libro. “Mi cometido es escribir lo mejor posible, y trato de aunar el rigor estético con la voluntad de comunicación intensa”, asegura este autor, extremeño de nacimiento y afincado en Sevilla, que se reconoce un enemigo férreo de las etiquetas culturales. “Las clasificaciones son cosa de críticos, actualmente no existen escuelas de poetas ni grupos literarios, sólo personas con afinidades y referentes comunes que disfrutan con la literatura”.