Samantha Vallejo-Nájera. 'Masterchef'

"Dar el pregón del orgullo gay me habría encantado"

  • La popular chef está volcada con la Fundación Garrigou, que trabaja con niños con síndrome de Down, como su hijo Roscón, con el que acaba de publicar un divertido libro de recetas y fiestas.

Inquieta, directa e inconformista. Así es Samantha Vallejo-Nágera, la prestigiosa restauradora que desde hace cuatro temporadas pone 'sabor' a las noches de TVE como jurado de MasterChef. Es, además, empresaria de éxito, madre de familia numerosa, bloguera y una de las caras visibles de la Fundación Garrigou, un colectivo que trabaja con niños con síndrome de Down, como su hijo Roscón.

-Se transformó en directora de orquesta con los niños de la Fundación Garrigou y ahora no ha dudado en tomar el martillo para conducir una puja benéfica en colaboración con Pepe Jeans por esta misma causa. Está claro que a usted no hay quien la pare cuando trabaja por una buena causa.

-Por supuesto que no. Cuando se trabaja por algo así, no hay que parar. Además, los niños con síndrome de Down son maravillosos y siempre te lo ponen muy fácil. Hay que seguir buscando cosas atractivas para conseguir que se sientan más protegidos y más integrados.

-Cuando un famoso se pone detrás de una campaña solidaria ¿Qué es lo que busca? ¿Respaldo social, dinero para financiar nuevos proyectos, dar mayor visibilidad a un colectivo...?

-Cuando un famoso se implica en cualquier causa de este tipo, generalmente sabe bien de lo que habla porque lo ha vivido en su familia. Yo he sido solidaria toda mi vida, pero es cierto que cuando te toca, te vuelcas mucho más con la causa. Los niños Down son personas maravillosas. Te cambian tu referente en la vida; te hacen más persona, tanto a ti como a los tuyos, y te aportan muchísimo. Te hacen pensar más en los demás y dan unión a la familia. Después del disgusto que recibes cuando te lo dicen, ya nunca más te vuelve a pasar porque son geniales. Lo importante es estar ahí cada vez que la fundación te necesita y que la gente sepa que este tipo de proyectos existen. Ya luego, el que quiera y pueda colaborar, por poco que sea, que lo haga, que euro a euro es como se consiguen las cosas.

-¿Cómo saca tiempo para este tipo de acciones siendo madre de familia numerosa, empresaria, jurado de MasterChef, bloguera...?

-No sabes qué estrés. Pues se consigue estando todo el día para arriba y para abajo y organizando tu tiempo al máximo. Pero todo me compensa. Disfruto muchísimo con todo lo que hago.

-Su último proyecto llega de la mano de su hijo Roscón, con el que acaba de publicar un libro de recetas y decoración de fiestas infantiles. ¿Cómo ha sido la experiencia?

-Maravillosa. Tengo varios libros de cocina publicados, pero ninguno como éste. He disfrutado el doble haciéndolo con él. Roscón con un disfraz y un espejo es el más feliz del mundo y haciendo el libro se lo ha pasado fenomenal. Lo que me gustaría es que el libro fuera un éxito para poder hacer la segunda parte.

-Había sido elegida, junto a sus compañeros de MasterChef, para ser la pregonera del día del orgullo gay, pero una campaña en Change.org lo ha impedido. ¿Cómo le ha sentado este cambio de última hora?

-Lo veía un reconocimiento precioso y estábamos encantados de haber sido los elegidos. Tanto a mí como a mis compañeros nos habría encantado ser los que abrieran las fiestas del orgullo gay de Madrid porque es un colectivo al que mostramos todo nuestro apoyo. Pero no ha podido ser. En cuanto a las críticas, que cada uno piense lo que quiera.

-Lleva cuatro temporadas al frente de MasterChef. Si este tipo de concursos hubieran existido cuando usted tenía 20 años ¿se habría presentado?

-Pues mira, nunca me lo había planteado. Seguramente sí, porque me parece un programa muy limpio, muy bien hecho y divertido.

-Se está grabando la versión celebrity del formato. ¿Nos va a sorprender?

-Va a ser lo máximo. Los aspirantes están muy entregados y se lo están pasando genial. Son muy competitivos entre ellos y estoy segura de que van a mostrar una imagen de ellos que no se espera. Aunque les vamos a zurrar igual que al resto, no creas.

-Lleva bastantes años siendo conocida como Samantha de España, pero desde que comenzó MasterChef hay muchos que no la conocen por ese nombre. ¿Sería posible entender a Samantha Vallejo Nágera sin Samantha de España?

-No. Al final soy yo siempre. La gente suele conocerme como Samantha de España porque son ya muchos años de carrera y, el que no sepa mi vida, que se la lea. El reconocimiento de MasterChef es más que claro, pero nosotros no somos gente de la tele, somos profesionales de la hostelería que el día que esto se acabe, seguiremos teniendo nuestro trabajo.

- ¿Cómo asume la popularidad? ¿Lo llevan bien en casa?

-Huy, ¡Yo tengo una vida muy normal, no creas!. Soy como cualquier madre de familia. En cuanto a la reacción de mis hijos, los más pequeños han crecido viéndome en la tele, y los mayores siguen siendo todavía pequeños para ver más allá. Lo asumen como algo normal.

-Es muy activa en las redes sociales, aunque en ocasiones ha tenido que soportar en ellas críticas por ser "demasiado pija" o por exponer demasiado a sus hijos. ¿Cómo afronta este tipo de comentarios?

-Mira, si la gente disfruta criticando, que lo haga. A mí me da igual. Tengo unos hijos monísimos y cuando me apetece ponerlos en las redes sociales, los pongo. Y al que no le guste, que no me siga. No entiendo las críticas por algo así; tenemos una vida corta y estamos aquí para intentar ser lo más felices posibles.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios