La actriz estadounidense Melanie Griffith, de 52 años, no termina de ganar la batalla contra sus vicios indeseables. La mujer de Antonio Banderas ha vuelto a ingresar en el centro de recuperación Cisque Lodge, situado en Utah, lugar donde han sido rehabilitadas estrellas de cine como Lindsay Lohan y Kirsten Dunst. El representante de la actriz manifiesta que su visita al centro forma parte de "un plan rutinario para mantenerse sana". Pero no es la primera vez que Griffith se enfrenta a una recaída de sus adicciones. En 1988, Melanie fue ingresada en la clínica Hazelden de Minesota por problemas con el alcohol y también paso un tiempo en el hospital en el año 2000, esta vez por abuso de calmantes tras haber sufrido una lesión de cuello. Fuentes cercanas a la pareja aseguran que Melanie ha ingresado gracias al apoyo de su marido quien quiere que su mujer se siga manteniendo "limpia y sobria". Banderas está pendiente en todo momento de la recuperación de su esposa, quien nunca ha ocultado sus vicios hasta el punto de hablar de ellos con naturalidad en su web, donde hace alusión a ellos y a la ayuda incondicional de su familia para combatirlos.