SEVILLA se convierte este fin de semana en la capital mundial de la belleza. La Feria de Abril es una improvisada pasarela donde las caras más conocidas se esmeran para estar más bellas que nunca. El traje de flamenca es el único traje regional suceptible de modas, aunque cada mujer adapta a su estilo y personalidad el traje que lleva. Una prueba de ello son los trajes que han lucido las caras populares.

Ainhoa Arteta apostó por un original modelo en negro y adornado en morado con la espalda de ganchillo, tendencia esta temporada, de la diseñadora Yolanda Rivas, la misma que también vistió a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz. Ainhoa paseó en coche de caballos con sus buenos amigos los estilistas Javier y Jacob Mascareña, responsables de su imagen, y también con dos amigas vascas, Matxalen Aguiló y Nekane Arana. Las vascas se enamoraron el pasado año de la Feria de Abril cuando vinieron a celebrar su 50 cumpleaños. Al grupo se unió la doctora Rocío Vázquez y acudieron a visitar a las grandes amigas de la soprano en Sevilla, las hermanas Carmen e Isabel Cobo, amantes de la música.

La diseñadora Aurora Gaviño ha sido una de las que más famosas ha vestido, desde la hija de Rocío Jurado y Ortega Cano, Gloria Camila, a Vania Millán, mujer de René Ramos o la doctora María Ángeles Grajal, casada con el torero Jaime Ostos. Raquel Revuelta se apuntó al clásico lunar de la colección de su buena amiga Pilar Vera "Del café al Tablao". Coincidió con la actriz Lucía Hoyos que escogió el blanco.

Raquel Bollo se inclinó por un color muy sevillano, coral y estampado, con su buen amigo el estilista Paco Cerrato, que ha estado dando consejos de cómo peinarse para ir a la feria .

Noelia Margotón, que ha sido habitual en la Maestranza junto a su marido el torero Víctor Puerto, acudía a la plaza de flamenca, también Laura Sánchez fue de las primeras en pisar el albero y unir trabajo y diversión.

Lourdes Montes escogió un vestido blanco y adornado en tonos buganvilla, sobria y elegante. Este año su hija Carmen no pisó el Real: "aunque la hemos vestido de flamenca en casa pero aún es muy pequeña para la feria". Ella sí disfrutó de paseo a acaballo junto a su marido, Francisco Rivera.