Lituania expuso el lunes las condiciones que plantea a la Unión Europea (UE) a cambio de dar este martes su visto bueno al mandato para iniciar la negociación de un ambicioso Acuerdo de Asociación política, comercial y energética con Rusia.

De cara a la reunión del Consejo de Exteriores de la UE que espera desbloquear el martes las negociaciones, Vilna presentó cuatro declaraciones que exige que se incluyan en el contexto del mandato, informó el jefe de la diplomacia lituana, Petras Vaitekunas.

En caso contrario, Lituania exigirá retirar de la agenda del Consejo el debate de la aprobación del mandato colectivo propuesto por Eslovenia en calidad de presidente de turno de la UE, dijo Vaitekunas en una entrevista al diario "Verslo Zinios".

Las cuatro condiciones son consideradas de "interés vital" para Vilna, aunque sólo dos afectan directamente al país báltico, que exige a Rusia una cooperación real en materia jurídica y que cumpla sus compromisos y obligaciones, en alusión ante todo al corte del suministro de crudo ruso en julio de 2006.

Los otros dos asuntos tienen que ver con la seguridad energética de la UE y las correspondientes garantías de Moscú, y la solución de los llamados "conflictos congelados" en el espacio pos-soviético, en un gesto de solidaridad, en particular, con Georgia, que acusa a Rusia de proteger a sus dos regiones separatistas y pro rusas.

Hace una semana, Vaitekunas afirmó que Lituania no boicotearía el inicio de las negociaciones con Rusia, pero aseguró que no cejaría en la defensa de sus intereses y aprovecharía la situación para arrancar a la UE el máximo posible de presiones sobre Moscú.

"No estoy seguro de que lo consigamos, pero debemos intentarlo. Desde luego, no será fácil. Tendremos una reunión desagradable del Consejo y unos asuntos muy incómodos para debatir", manifestó hoy el ministro.

Lituania había amenazado con sumarse al veto polaco al inicio de las negociaciones con el Kremlin en caso de que Rusia no reanudara el suministro de crudo por el oleoducto Druzhba, interrumpido en julio de 2006 en medio de roces entre Vilna y Moscú.

En Bruselas, fuentes comunitarias afirmaron hoy que, salvo sorpresas de última hora por parte de Lituania, la UE desbloqueará mañana el mandato para iniciar la negociación del nuevo acuerdo de asociación con Rusia, tras superar dos años de veto de Polonia.

El Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad, Javier Solana, aseguró el domingo que entre los Veintisiete hay un "firme consenso de que las negociaciones sobre el nuevo documento, que sustituirá el Acuerdo de Asociación con Rusia de 1994, deben empezar cuanto antes".

Según fuentes comunitarias, Rusia no tiene ninguna prisa en renovar los pactos que la vinculan con la UE, y son los Veintisiete los que pretenden ganar fuerza con una sola voz ante Moscú y obtener mayores ventajas recíprocas de su relación con el gigante ruso.

La UE quiere estrenarse en la primera cumbre bilateral con Dmitri Medvédev, el sucesor del presidente saliente ruso, Vladímir Putin, el próximo junio en Siberia, con un mandato unánime para concretar un acuerdo comercial, político, de derechos humanos y, ante todo, energético.

Rusia es el origen del 40% de todas las importaciones de gas de la UE, así como del 32% del petróleo y del 17% del carbón que compra en el exterior.

El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, se mostró confiado de que la UE logre superar sus discrepancias internas para que Moscú y Bruselas puedan "iniciar las negociaciones en un futuro próximo y anunciarlo así ya en la cumbre bilateral" de Siberia.

Mientras, otro país báltico, Estonia, confirmó hoy que no bloqueará el inicio de las conversaciones con Moscú, a pesar de que considera justas y respalda las exigencias de Lituania.

"Es mejor llevar a cabo negociaciones que bloquearlas. Esperamos que en la reunión ministerial del martes se apruebe el mandato para iniciar el diálogo", declaró en Riga la portavoz de la Cancillería estonia, Tiina Maiberg.