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Cultura

'Berlin Calling', caída y catarsis de una estrella del 'techno'

  • El homenaje de Hannes Stöhr a la rica escena 'electrónica' de la capital alemana llega al festival

Berlin Calling va camino de romper en la capital alemana todos los récords de permanencia en cartelera. La película de Hannes Stöhr (Berlin is in Germany, Galatasaray-Dépor), una crónica turbia del modus vivendi de una estrella del techno filmada con tanta pasión por la electrónica como reparo ante el hedonismo sin fin, resiste en los cines berlineses desde hace 115 semanas. Stöhr, que se define como “neorrealista”, atribuye el éxito a la condición de “espejo de la realidad” del músico y dj que protagoniza la película, encarnado por Paul Kalkbrenner, uno de los nombres conocidos de la escena trance de la ciudad y autor de los temas de la banda sonora.

“Viví la movida techno de los 90 –dice el director sobre una época en la que clubes como el Tresor se erigieron en prescriptores mundiales del género–. Pasaron esos años y me aburrí un poco de la electrónica. Siempre quise hacer una película sobre la época, pero en 2003 descubrí que en el underground había de nuevo cosas estupendas”. Entre ellas cita al clásico sello BPitch Control, dirigido por Ellen Allien, en cuya figura parece inspirarse, por mucho que Stöhr lo niegue, la dueña de la discográfica que aparece en la película.

La cinta, que se exhibe hoy (Nervión Plaza, 21:45) por segunda vez dentro del certamen, narra la historia de un discjockey que vive estirando las noches hasta el delirio, una espiral tóxica y caótica que desemboca en un brote psicótico. Ingresado en un centro de desintoxicación, con la cabeza menos nublada, comenzará a componer su nuevo disco, cuyo techno melódico y amable se escucha en buena parte de las escenas. 

Estrenada hace ya dos años en Alemania y adquirida ahora para su distribución en España por Karma Films, la película plantea una “vieja lucha”, dice el cineasta alemán: “¿Qué es más fuerte, la droga o el arte?”. Stöhr, que admite que la cinta tiene una evidente “visión moral”, toma partido. “Al final, lo que yo digo es: allá tú, pero cuidado con las drogas. Aunque eso no significa que Berlin Calling se parezca a una campaña gubernamental”.

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