Una noche para sobrevivir. Thriller, EEUU, 2015, 114 min. Dirección: Jaume Collet-Serra. Intérpretes: Liam Neeson, Joel Kinnaman, Ed Harris, Vincent D'Onofrio, Genesis Rodriguez. 

Entre 2005 y 2009 (La casa de cera, Gol 2: viviendo el sueño, La huérfana) Jaume Collet-Serra logró una cierta reputación como director eficaz en el competitivo escenario anglo-norteamericano. Revalidó su posición entre 2011 y 2014, convirtiéndose en uno de los nombres importantes del cine popular de acción, al asociarse a Liam Neeson en Sin identidad y Sin escalas, películas en las que, además de a la famosa estrella, dirigió a Diane Kruger, Bruno Ganz, Audan Quinn, Frank Langella o Juliane Moore. Ahora toca techo al completar su trilogía con Neeson en una película igual pero mejor que las anteriores en la que también intervienen Ed Harris y Vincent D' Onofrio.

Si se pone uno exigente se podría decir que el ascenso de Collet-Serra es paralelo al descenso de Neeson. Porque si el realizador español ha ido escalando posiciones en el cine comercial, Neeson ha ido siendo devorado (más bien dejándose devorar a cambio de sustanciosos beneficios) por él. Tras lograr ascender desde papeles secundarios a actor de prestigio en los 90 con Maridos y mujeres de Allen, La lista de Schindler de Spielberg, Nell de Apted o Michael Collins de Jordan, se dedicó casi en exclusiva a películas de acción cada vez más rutinarias, destacando la trilogía interpretada a las órdenes de Collet-Serra o la muy parecida trilogía de Venganza. Tal vez Scorsese, con quien trabaja en su próximo proyecto, lo redima de tantos papeles insustanciales que lo han convertido en el Charles Bronson del siglo XXI.

Dicho lo cual hay que añadir que siempre es un buen profesional, que Ed Harris le da una réplica espléndida, que Collet-Serra practica su visualmente ruidoso no-estilo cada vez con mejor oficio (y guiños cinéfilos a los grandes artesanos del cine negro de los 60 y los 70, tipo Friedkin o Yates) y que las historias de venganza, redención, asesino retirado que vuelve a matar y forajido que se enfrenta a los suyos (la banda mafiosa) para defender a los más suyos (la familia) siempre funcionan bien si mantienen unos mínimos de dignidad. Y esta película idéntica a tantas otras (Neeson, como el ya citado Charles Bronson, se ha convertido en un subgénero) lo hace sobradamente.