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Cultura

Rivera Ordóñez corta cinco orejas y un rabo en su corrida mil, en Estepona

GANADERÍA: Toros de distintas ganaderías. TORERO: Francisco Rivera Ordóñez, como único espada en su corrida número mil, oreja, dos orejas, ovación, ovación, ovación y dos orejas y rabo. Incidencias: Plaza de toros de Estepona. Casi tres cuartos de entrada.

Francisco Rivera Ordóñez salió por la puerta grande de la plaza malagueña de Estepona al cortar cinco orejas y un rabo, en la conmemoración de su corrida número mil, donde se encerró en solitario con seis toros de las ganaderías de Zalduendo, Manolo González, Ana Romero, Carlos Núñez y La Palmosilla, que ofrecieron un juego desigual. La corrida estuvo amenizada por la banda de música de Los Barrios (Cádiz) y los cantaores Diego Carrasco, Fernando de la Morena, Antonio Santiago y Fernando Soto, y al toque Moraito Chico y Emilio Caracafé. En la plaza, que registró casi tres cuartos de entrada en tarde soleada y calurosa, había muchas caras conocidas en los tendidos como el hermano del diestro, Cayetano Rivera, a quién brindó el tercer toro de la tarde; la Duquesa de Alba, María Teresa Campos y José María García, el alcalde de Estepona, David Valadez, y su hija Cayetana Rivera, que dio la vuelta al ruedo con el torero tras matar el último toro, que le brindó.

Rivera Ordóñez toreó a beneficio de la Asociación Andaluza contra la Fibrosis Quística, considerada enfermedad rara por afectar a 1 de cada 2.500 personas. La plaza de Estepona es un marco muy relacionado con Rivera Ordóñez, ya que el primer empresario de dicha plaza fue su abuelo Antonio Ordóñez y el cartel de inauguración de la plaza, el 4 de junio de 1972, lo formaron su tío abuelo Luis Miguel Dominguín y su padre Paquirri.

El público se volcó con Rivera Ordóñez, que en tres de los toros puso el lote de banderillas, recibiendo calurosos aplausos. Al quinto de la tarde lo recibió a portagayola.

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