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Cultura

"Los teléfonos móviles se usan hoy como pistolas"

  • Álex de la Iglesia aborda en 'Perfectos desconocidos' la pérdida de intimidad que acarrean las redes sociales

Álex de la Iglesia.

Álex de la Iglesia. / Susanna Sáez / efe

álex de la Iglesia repite en las salas españolas por segunda vez en 2017 y, tras El bar, firma ahora Perfectos desconocidos, una comedia coral sobre la pérdida de intimidad que acarrea la obsesión con las redes sociales, que hacen que "los secretos sean como balas y los móviles, como pistolas", señala el director vasco. La película sitúa al espectador como testigo de una cena de amigos en la que alguien propone dejar los móviles sobre la mesa y que todos accedan a "sus secretos": llamadas, SMS, Whatsapps, notificaciones de Instagram o Facebook...

Se trata de la versión española -encargada por Telecinco- de una taquillera producción italiana, titulada igual y dirigida por Paolo Genovese. "En el momento en que te pones a rodar la haces tuya. Es muy mía", asegura De la Iglesia sobre esta cinta que llega a los cines este viernes. El guión lo adaptó el director junto a Jorge Guerricaechevarría, "aunque muy poco", dice, "lo justo para meterle un momento más Capra, más sobrenatural", en este caso, luna llena gigante y roja que preside la cena y que en la mitología maya "volvía loca a la gente". En el reparto hay actores que nunca habían trabajado con el vasco como Ernesto Alterio y Juana Acosta, además de Eduard Fernández, Belén Rueda, Eduardo Noriega y Dafne Fernández. También está Pepón Nieto, que repite con el director tras Las brujas de Zugarramurdi y Mi gran noche.

El personaje de Nieto da una de las claves de la comedia: las nuevas tecnologías nos mantienen constantemente conectados con tal cantidad de gente que al final aparece la angustia. "Esa es otra aportación mía al guión", dice De la Iglesia. "A mí me saltan los mensajes sin parar. Y no puedo. De algún modo las redes te obligan a una vida en común y eso luego te pasa factura. Y de eso habla la película -resume el director de El día de la Bestia-, de la pérdida de la intimidad. La gente cree que hay que ser sincero, pero no es necesario compartirlo todo".

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