Pocas ofertas culturales parecen tan apropiadas al adelantado espíritu navideño como un buen musical. El género, que atraviesa una etapa de gloria de difícil parangón en su historia, se ha convertido en la verdadera gallina de los huevos de oro de las artes escénicas, con teatros consagrados a sus producciones, giras multitudinarias y contratos desorbitados, hasta el punto de haber hecho especialmente rentable un tipo de montaje tradicionalmente costoso. El ejemplo de libro llega mañana al Teatro Cervantes, donde permanecerá en cartel hasta el sábado: Fama, la versión española del famoso musical basado en la película de Alan Parker de 1980, despliega sus sueños de éxito con todas las entradas agotadas, lo que convierte a Málaga en una de las plazas que mejor ha acogido la propuesta durante una gira que atraviesa ya su segundo año.

Serán así en total 7.700 espectadores (el Teatro Cervantes tiene un aforo de unas 1.100 butacas) malagueños los que disfruten con la aventura, ya clásica en la imaginería de los años 80, de un grupo de alumnos de la High School of Performing Arts decididos a alcanzar el éxito y entregar en sacrificio hasta sus propias vidas para conseguirlo. Con la dirección escénica de Ramón Ribalta, el espectáculo mantiene el mismo espíritu de la película y la posterior serie de televisión, aunque con algunas modificaciones en personajes (Leroy Johnson se hace llamar aquí Tyrone Jackson) y sobre todo en coreografías: junto a los conocidos números de danza moderna y ballet clásico se incluyen algunos cuadros de baile flamenco, en un esfuerzo de acercamiento a la cultura española. Las canciones son interpretadas en castellano excepto la famosa sintonía de la serie Fame, que cierra la función y se canta en inglés.

El reparto incluye una importante nómina de jóvenes artistas como Sergio Alcover, Damaris Martínez, Esther Peñas, Ferrán González, Yolanda Serrano, Jordi Coll, Cristina Castaño y Noelia Cano, que cantan, bailan, interpretan, tocan instrumentos y se someten a un importante desgaste físico en escena. Entre ellos destaca el actor malagueño Salvador Toscano, que ha trabajado en otros musicales como La pequeña tienda de los horrores, Annie y Jekyll & Hyde, y que en Fama da vida al señor Myers, uno de los exigentes profesores del centro que exprimen al máximo las virtudes artísticas de los estudiantes.

En Fama tampoco faltan los músicos en directo: una gran banda que corona la escena sobre la que los sueños ansían hacerse realidad.