Su papel de tímido cowboy le catapultó a la fama en el firmamento de Hollywood. Su buen hacer en el premiado drama Brokeback Mountain le reportó una nominación a los Oscar y de repente pasó a ser conocido en todo el mundo. Ahora la vida se ha cobrado el peaje que exige cuando el aire escasea en la cumbre del éxito. El actor australiano Heath Ledger fue hallado muerto el martes en su lujoso loft, en el pintoresco barrio neoyorquino del Soho. Tumbado en el suelo y desnudo, delante de la cama. Había un tubo de pastillas para dormir junto a él. Tenía 28 años.

La autopsia realizada ayer al actor no permite sacar conclusiones sobre las causas de la muerte y será necesario realizar nuevos exámenes, según anunciaron los médicos forenses. Fuentes policiales citadas por la cadena CNN descartaron un homicidio.

Al echar una mirada tras la brillante carrera se ve un hombre joven, que tal vez alcanzó la fama demasiado rápido y temprano, y al que nunca le resultó fácil manejarla. A los 17 años abandonó los estudios y el hogar, y con 19 se mudó a Los Angeles.

Tras una serie de películas independientes consiguió con la película de adolescentes Diez razones para odiarte, su primer gran éxito. Tenía montones de chicas a sus pies. Pero no quiso participar en más películas de ese estilo. "Tengo la impresión de que desperdicio el tiempo si sencillamente me repito", dijo en cierta ocasión. Ledger quería personajes con empaque, trabajar en películas que lo desafiaran. En 2001 participó en Monster's Ball y siguieron otros trabajos como Los hermanos Grimm o Candy, donde interpretó a un poeta que lucha contra su adicción a la heroína.

El último trabajo que se ha visto en la gran pantalla fue I'm not there, una película en la que comparte cartel con Cate Blanchett. Pero su mayor éxito seguía siendo Brokeback Mountain, sobre el hermoso amor secreto entre dos atípicos héroes de western.

Ledger tenía dificultades con la vida que llevan las estrellas, perseguidas continuamente por fotógrafos y la prensa. A ello se sumaron dificultades personales. Ledger comenzó a salir durante el rodaje de la película de Ang Lee con la actriz Michelle Williams, que da vida a su mujer. Hace dos años fueron padres de una niña, Matilda Rose. La pareja se separó hace unos meses, pese a que él estaba muy unido a la pequeña. Williams, que conoció la noticia de la muerte de Ledger mientras rodaba en Suecia, se quedó "completamente consternada" con la noticia.

También en su vecindario en Nueva York afectó la noticia. La polícía se llevó su cadáver, dentro de una bolsa de plástico, ante la mirada de curiosos y fans, que esperaban a la puerta del 421 de Broome Street. El actor no ha dejado ninguna carta de despedida, pero recientemente había hablado de la muerte. En una entrevista con motivo del estreno de I'm not there, los periodistas le preguntaron si su hija le había cambiado la vida. Él afirmó entonces que tenía la sensación de que ya se podía morir porque estaba vivo en ella.