Cultura

La liga del 'tercer tiempo'

  • Casi 200 jugadores de 13 países han participado en la primera edición del Mundialito sin Fronteras

La única liga del mundo que tiene tres tiempos se disputa en Málaga. No juegan Eto'o, Raúl, Kaká ni el niño Torres, ni falta que hace. Se llama Mundialito sin Fronteras y es puro fútbol del bueno aliñado con dosis de convivencia en torno a un balón que no distingue de fronteras. Un total de 20 equipos de 13 nacionalidades distintas son los que se han disputado este torneo de fútbol 7 que acabó ayer con la victoria del equipo colombiano. El colofón, como siempre, el tercer tiempo: un almuerzo de hermandad entre españoles e inmigrantes en torno a una paella, unos platos tradicionales de los países participantes o lo que se tercie.

"La idea es que se normalicen las relaciones entre los ciudadanos de aquí y los inmigrantes y la verdad es que ha sido un éxito de participación", explica Julio Andrade, concejal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Málaga, la organizadora del Mundialito con apoyo económico de la Junta de Andalucía y la gestión de la Coordinadora de Inmigrantes. Tal ha sido el interés demostrado por el colectivo destinatario que el Consistorio ya prepara la edición del año que viene. Será una verdadera liga de largo recorrido al estilo de la que ya organiza la Comunidad de Madrid para favorecer en entendimiento entre culturas.

Una subvención de 35.000 euros de la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta y el apoyo del Ayuntamiento han hecho posible este torneo, que nace de una experiencia piloto de 2006. "El año pasado, coincidiendo con el Día Internacional de la Inmigración se jugó con seis equipos en una mañana, en Portada Alta, y fue una barbaridad de gente", rememora Antonio Tallón, responsable de Políticas Migratorias del Gobierno andaluz en Málaga.

Nelson Marín es el técnico del Amigos de Colombia para la integración, el equipo masculino que ayer se alzó con la victoria en la final del Mundialito, celebrada en el campo de fútbol de El Romeral. "La clave ha sido la técnica, el buen manejo del balón y que hay una buena sincronización en el equipo", explica este entrenador, orgulloso del éxito cosechado.

Un total de 192 jugadores han participado en el torneo que no sólo ha reunido a hombres en torno al balón. Cuatro de los 20 equipos participantes han sido de mujeres y ellas también tuvieron ayer su final, que fue para Bolivia.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, obsequió con unos recuerdos a los participantes, pero la verdadera entrega de premios tendrá lugar el sábado en el Pabellón Martín Carpena. Los ganadores recibirán sus trofeos en el transcurso de la Feria del Voluntariado y las Migraciones y con la asistencia de jugadores del Málaga.

Allí estarán Emilse Zarza, del Paraguay femenino, y Luis Damacio Tualombo, que ha coordinado al Bolivia masculino. Ni unos ni otros han sido líderes, pero no parece importarles demasiado. "Lo bonito ha sido la participación y el ambiente de alegría que hemos vivido aquí", explica él. Lleva siete años en Málaga, pero confiesa que "las raíces tiran" y que esta es una forma de reencontrarse con los suyos y, al tiempo, de relacionarse con españoles. Dos de los equipos participantes, el Ciudadanos Malagueños y el Cruz Verde, están formados íntegramente por población autóctona.

20

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios