La fuerza mediática del tradicional concierto de año nuevo que se retransmite cada primero de enero desde la Sala Dorada de la Musikverein de Viena está dando sus frutos. Por esta razón, muchas orquestas del este se ponen en camino antes de que suenen las célebres doce campanadas, para ofrecer en los primeros días del nuevo año un rosario de conciertos en países de la comunidad europea, entre ellos España, con repertorio de la familia Strauss, aprovechando así la expectación que provocan los vieneses.

Un año más pudimos asistir en Villamarta a este concierto, organizado por Promoconcert e interpretado por la Strauss Festival Orchestra, agrupación que toma esa denominación durante sus giras de esta época del año. Se trata de una de las formaciones más importantes de su país, con sede en la ciudad de Ulyanovsk, que se ha ganado su prestigio más allá de sus fronteras gracias a estos recitales, en los que también se suma el Strauss Festival Ballet Ensemble, con el que, obviamente, está muy ligado.

En la noche del pasado viernes la Strauss Festival Orchestra escogió un amplio repertorio: más de una veintena de obras entre oberturas de opereta, valses, polcas, marchas y galopes, entre los que destacaron El murciélago, el Vals del Emperador, la Vida de Artista, la polca Truenos y relámpagos, etc, aunque no siempre se ciñeran al programa anunciado.

El conjunto dirigido por Konstantin Barkov, quien demostró gran profesionalidad, contó así mismo con la intervención de la soprano Luzmila Lazarzhik quien interpretó dos fragmentos de la opereta El Murciélago y la versión vocal del Vals de los Cuentos de los bosques de Viena.

Obviamente, la interpretación del conjunto, aderezada con algunas intervenciones del ballet, concluyó con las más afamadas piezas de este repertorio.