El Íbex 35 cerró ayer con un retroceso del 0,15%, lo que impidió al selectivo mantenerse por encima de la cota psicológica de los 10.300 puntos (10.309,4) y acumular una subida del 0,62% en la semana.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se colocó en 128,9 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,701%. Mientras, en el mercado de divisas el euro se intercambiaba por 1,0806 dólares.

Grifols se erigió como el mejor valor de la jornada con un repunte del 2,3%, hasta los 22,15 euros, seguido de Aena (+0,99%) y Amadeus (+0,96%). También celebraron con optimismo la sesión Mediaset (+0,85%) y Endesa (+0,78%).

La otra cara de la moneda la mostró Repsol, farolillo rojo de la jornada con una caída del 1,27%, seguido de Gamesa (-1,23%) y Viscofan (-1,19%). Tampoco consiguieron mantener el tipo Popular, que cedió un 0,98%, y Cellnex (-0,88%).

Salvo Endesa, que avanzó un 0,78%, el resto de los grandes valores se adentraron en pérdidas, con retrocesos que oscilaron entre el 1,27% de Repsol y el 0,15% de Santander. Telefónica recortó un 0,66%, Inditex un 0,47%, BBVA un 0,27% e Iberdrola un 0,23%.

En este contexto, el selectivo español compartió la tendencia negativa de París y Londres y se separó de Frncfort, que subió un leve 0,2%.

En opinión del analista de XTB Rodrigo García, el Íbex cierrauna semana "con altibajos", en la que "ha predominado la volatilidad". "Tras una primera mitad de semana complicada, el impulso al alza iniciado a mitad de la misma hizo que el selectivo nacional se situase a cierre del viernes en niveles no vistos desde finales de 2015".