La Bolsa española cayó ayer el 1,81% en su peor sesión en cuatro meses y perdió el nivel de 10.300 puntos, arrastrada por los descensos de los grandes valores y la banca, así como por el retroceso de Wall Street desde la apertura.

El principal índice selectivo español, el Íbex 35, bajó 187,80 puntos, ese 1,81%, hasta 10.211,2, nivel de principios de enero, con lo que cierra la peor semana desde noviembre de 2016 con un retroceso del 3,63%. Las ganancias del año se reducen al 1,67%.

Madrid fue el mercado más bajista entre las principales plazas europeas, donde Fráncfort perdió el 1,67%, después de que el primer banco alemán, el Deutsche Bank, haya bajado el 6,21% tras presentar sus cuentas anuales, en las que ha registrado pérdidas por tercer año consecutivo. París cedió el 1,64%; Milán el 1,38% y Londres el 0,63%. Con la prima de riesgo a la baja, en 70 puntos básicos, el mercado bursátil español entró en pérdidas desde el inicio de la sesión, al hilo de las principales bolsas asiáticas, ya que Tokio cayó un 0,9% y Hong Kong un 0,12%.

Todos los pesos pesados del Íbex cerraron con pérdidas, pues Inditex bajó el 2,26%; Telefónica el 1,77%; Repsol el 1,7%; Iberdrola el 1,6%; Banco Santander el 1,46% y BBVA el 1,39%. ArcelorMittal y DIA fueron los valores más bajistas de un Íbex, donde todas las compañías terminaron con pérdidas, tras ceder el 3,89% y el 3,57%, respectivamente. En el mercado continuo, los derechos de Vértice 360 cedió el 7,79%, mientras Saeta Yield subió el 5%.

El precio del barril de Brent, crudo de referencia europea, disminuía hasta 68,17 dólares al cierre del parqué nacional, que negoció casi 2.900 millones. El euro finalmente dio una tregua y al cierre bajaba a 1,244 dólares.