UN año ha cumplido ya ese artilugio que llaman pomposamente Metrocentro (vulgo El Tranvía) y nadie le ha cantado "cumpleaños feliz, cumpleaños feliiiz". No obstante, el alcalde Monteseirín hizo una fiestecilla para celebrarlo y recogió un certificado de calidad Aenor "por su puntualidad y buen servicio". Estaba muy contento, y aprovechó la oportunidad para decir que el Metrocentro ha sido utilizado en su primer año por 4,6 millones de viajeros. Un éxito, por consiguiente, digan lo que digaaan… los demás.

-¡Huy, cuánta gente! Pero estas cifras no me cuadran. En Sevilla hay 699.145 habitantes, según las estadísticas oficiales del año pasado; y el turismo ha bajado, según dicen Manuel Otero y Antonio Távora cada vez que les preguntan.

Es que esos viajeros del tranvía son los mismos, que viajan varias veces al año. Ya hay incluso adictos al tranvía, y al mismo señor y a la misma señora los contabilizan como 50 viajeros. Las estadísticas son así. Para que ustedes lo vean más claro, se ha explicado que la demanda media del servicio del Metrocentro en un día laborable se cifra entre 16.500 y 17.000 viajeros.

-¡Otro éxito! El tranvía está que arrasa.

No, otro truco. Esta noticia depende de cómo se mire. Se puede titular en versión exitosa: "Casi 17.000 viajeros utilizan diariamente el Metrocentro". O bien se puede presentar en versión crítica: "Sólo el 4,1% de los sevillanos utilizan diariamente el Metrocentro". O más críticos todavía, para fastidiar al señor alcalde: "El 95,9% de los sevillanos no utilizan el Metrocentro". Y todo es verídico, Pitagorín.

Vean ustedes el juego que pueden dar los 17.000 viajeros diarios del tranvía de la señorita Pepis, que son casi siempre los mismos. Por eso Monteseirín dice una cosa, con permiso de Torrijos, que es el dueño de la llave para abrir la Casa Grande, y Zoido dice lo contrario. Pero, en verdad, que el tranvía cumpla un año, sin que viajen como pasajeros el 95,9% de los sevillanos, tampoco es para tirar cohetes desde el despacho de la Alcaldía, sobre todo teniendo en cuenta que pronto vamos a disfrutar del juguete más demandado este año a los Reyes Magos del Ateneo: el Metro auténtico.

Ahí sí que me quiero subir, después de bajar al subterráneo, para ver si es competitivo o son también figurantes, con los mismos pasajeros dando vueltas. Este Metro nacerá partidista y discriminatorio: se podrá utilizar para ir a los partidos del Sevilla, pero no a los del Betis. La estación verderona es de la línea 3, así que espera, y la llamarán Heliópolis. ¿Se imaginan lo que se han perdido?

-Próxima estación: Ruiz de Lopera.

¡Y que no le hubiera gustado a don Manuel tener una parada!