Blanqueándose están ya las veredas y los caminos de Andalucía la Baja con esas caravanas que parecen de pioneros que van en busca de asentarse en la tierra más buscada. Paulatinamente, los tentáculos viarios que rinden en las Rocinas van llenándose de gentes que anhelan postrarse ante la Blanca Paloma. Ha comenzado la semana más intensa de cuantas componen el calendario lúdico-religioso de esta Andalucía que sí parece vertebrada al conjuro de una fe sin tacha. Si ya ayer se veían carretas que van llegando de los sitios más lejanos, hoy estará el Aljarafe en pie de pólvora y rezos para que mañana suene la gran traca con la salida de Triana y también de Gines, que hay que ver lo que significa el Rocío en todos esos pueblos de la cornisa. Gran espectáculo que nos sumerge en el túnel del tiempo ver esos caminos y esas veredas luminosamente blanqueados.