SE cumplieron las profecías más pesimistas, como se veía venir, en esta Sevilla donde todo está cuantificado, a ojo de buen cubero. El gerente de los hoteleros de Sevilla, Santiago Padilla, confirmó que el turismo durante el puente de la Constitución, para los laicos, y la Inmaculada, para los creyentes, bajó entre un 20% y un 40% (según los hoteles). No obstante, y siendo optimistas, ante lo que se avecina, confían en los muchos alicientes navideños que tiene Sevilla para que el mes de diciembre no sea una ruina total. ¿Alicientes? Pero un 20% de pérdida de turistas, como mínimo, no lo evitará nadie, ni con viajes en grupo. Y ya se sabe también que, a pesar de los muchos alicientes navideños de Sevilla, las ventas del comercio local bajarán un 20%, incluso con rebajas adelantadas.

Casi todo baja un 20% en esta ciudad, para eso estamos en tiempos de crisis. Sin embargo, el portavoz del PP, Juan Ignacio Zoido, que pasea mucho desde hace algún tiempo y se dedica al recuento, ha detectado un importante aumento del número de gorrillas. Aunque Zoido no ha elaborado todavía un censo oficial de gorrillas, es probable que hayan aumentado un 20%, se lo digo ya.

-Ya verás como en Semana Santa nos contarán que los nazarenos han bajado un 20%, por culpa de la crisis.

-Y el gasto en la Feria es previsible que descienda otro 20%.

Hay que prepararse para lo peor, ya lo advirtió Solbes y lo desmintió Griñán, pero todo sigue bajando un 20%. Menos los gorrillas, que están en aumento. Zoido no ha entendido que es una profesión demandada, con mucho futuro, por culpa de la crisis.

Otro gremio que cotiza al alza es el de los vándalos urbanos. Como Sevilla es una exposición en sí misma, los vándalos acuden a estas muestras callejeras como las moscas a la mierda, con perdón para la moscas, por la comparación. El derribo de estatuas crecerá en Sevilla un 20%. El Tritón Alado de Dalí ha caído porque las alas eran de mentira. Los vándalos urbanos lo tiraron con las dos manos y creían que volaba. No entendieron que este tritón es de los fijos, y no se mueve ni para tomar una cerveza en La Alicantina. Si la cosa se pone fea, es probable que el Pensador de Rodin piense en refugiarse en el despacho del alcalde. Cualquier mañana, Monteseirín se lo encuentra allí, pensando, como él.

La cuota del 20% se debería extender a otros gremios, donde no pasaría nada de particular. ¿Qué ocurriría si el número de concejales se reduce un 20%? Pero tampoco hay que dar malas ideas, porque el paro en Sevilla también está en el camino de crecer hasta el 20%. Menos mal que la Navidad nos llegará cargada de alicientes, aunque la iluminación en las calles ha descendido un 20%, y los Reyes Magos lanzarán un 20% menos de caramelos. ¿O no?