DIRECTO Madrugá Sevilla en directo | Semana Santa 2024

El tiempo El tiempo en Sevilla para la Madrugada

Gafas de cerca

Tacho Rufino

jirufino@grupojoly.com

Mi propio evasor fiscal privado

Uno de los rasgos del español cainita es defender a su futbolista de cabecera evasor fiscal frente al futbolista evasor fiscal del equipo rival. O sea, para no pocos lo importante no es que los tíos tanguen cantidades brutales, sino su Hala Madrid o su Visca Barça. La tribu es lo que importa: sobre todo la odiada tribu enemiga. Esta semana hemos sabido que Cristiano Ronaldo ha sido acusado por la fiscalía de evadir 14,7 millones de euros mediante peloteo entre sociedades destinado a ocultar las rentas que le producen en España sus derechos de imagen (ventajillas pírricas de ser un aficionado a un club de provincias: tu plantilla no da para grandes evasiones). En la acusación, se cita el precedente del "otro" mejor jugador del mundo, el barcelonista Lionel Messi, que fue hallado culpable por motivos similares. Lo de Ronaldo es unas tres veces más gordo, de forma que "no entremos en el porqué reglamentario" no puede negociar de la misma forma que Messi porque eso implicaría su entrada en prisión (al argentino se le condonaron 21 meses de prisión a cambio de una multa).

Se acuerda uno de Piqué, "més que un futbolista", o sea, que es también un político, y bien mirado uno de los que tiene mayor resonancia. El central y activista del proyecto de República Catalana tiró, escondiendo la mano, la piedra aquella: "Lo que no me gusta es ver en el palco del Madrid a las personas que hay [se refería con poco tino a una abogada del Estado] y cómo mueven los hilos ahí en este país. Por ejemplo, la persona que imputó a Messi y Neymar estaba en el palco, y con Cristiano, nada". La fe ciega en la causa es lo que tiene: siempre se pierden buenas ocasiones de callarse, se desboca uno. Hay algunas conclusiones que obtener de esto. Primero, que la Liga de las Estrellas se basa en un trato de favor público a los clubes grandes y en leyes que hacen para las estrellas del balompié más atractivo nuestra liga que la alemana o la italiana. Segundo, que el filón de los archimillonarios peloteros de lujo es muy apetitoso para la Agencia Tributaria en estos momentos, y el acusado siente mucho más que otros defraudadores el calor de los focos en su cabeza y la amenaza de algún loquito por la calle, con lo que afloja la mosca con mayor facilidad. Y tercero, que para un madridista de pro el delito de Messi es mayor que el posible de Ronaldo. Y viceversa. Es de aplicación la teoría del carácter inodoro de las ventosidades propias. Porque, olvídese, para muchos el fútbol es muchísimo más importante que los ingresos fiscales. Dame opio y dime tonto.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios