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Desde mi córner

Luis Carlos Peris

Los segundos serán primeros

Nunca en la Champions pasó que tras la liguilla ofreciese mejor futuro la segunda posición de cada grupo

RESULTA que por una vez y sin que sirva de precedente, haber sido segundo en la carrera puede derivar a una ventaja que no tendrá el primero. Vivir para ver, pero eso de que los últimos serán los primeros no sólo se da con el Reino de los Cielos como destino sino en plena y actual Champions League. Nunca se había dado esto de que fuese tan bueno ir rezagado en una carrera y es que mejores perspectivas de cara al sorteo del 19 tiene, por ejemplo, el Villarreal que la Juventus y no digamos que el Panathinaikos, esa especie de bombón para la jauría de depredadores que aguarda emboscada en las segundas plazas de grupo.

Ítem más, por ejemplo el Barça tiene ante sí un panorama más temible que el Real Madrid, su espejo de toda la vida. Si al Realísimo puede tocarle algún temible como Liverpool, al líder de la nuestra Liga le puede caer en desgracia el Chelsea o el Arsenal, el Inter o el Olympique de Lyon. Han sido demasiados los favoritos que no han ofrecido el nivel esperado, de ahí que se produzca una especie de overbooking de pesos pesados agazapados en la segunda plaza. Otro ejemplo de que no hay mal que por bien no venga lo tenemos en el Atleti, pues, visto lo visto, ahora quizá no lamente los desarreglos arbitrales sufridos tanto en el Calderón como en Anfield.

Otra ventajilla para los segundos más ilustres es que hay primeros con más nombre que potencial. Por ejemplo, Bayern y Oporto no son lo que eran con Kahn en la portería y Mourinho en el banquillo, respectivamente. Han dado una medida buena en la liguilla, pero sin que metan miedo a nadie, por lo que junto a los griegos sorprendentes de Panathinaikos pueden convertirse en los grandes bombones del bombo suizo. Se prevén unos emparejamientos muy sugerentes para que la Champions entre en el vértigo que la prestigia. La liguilla sólo ha servido para desvirtuar posiciones y para que, como en el juicio final, los últimos puedan ser los primeros.

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