El secretario general de Ciudadanos (C's), José Manuel Villegas, mantuvo ayer su apoyo a las actuaciones del Gobierno de Mariano Rajoy ante la crisis catalana "por lealtad", a pesar de que no se haya contado con la formación naranja para las últimas medidas tomadas por el Ejecutivo, y aseguró que esperan que se hayan "realizado los trámites necesarios para que se obtenga un fin".

Así lo puso de manifiesto en una rueda de prensa en la sede del partido naranja después de reunirse con los portavoces autonómicos de Ciudadanos para marcar "los pasos a seguir" por el grupo político durante el 2018 y ser la "opción moderna" que necesitan los españoles.

Villegas reiteró que Cataluña no se merece "un presidente prófugo de la Justicia" ni puede presidir el Parlament "una persona incapaz de asumir su responsabilidad y no dar la cara ante la justicia". "Los catalanes no se merecen un president de plasma", remarcó el dirigente del partido naranja.

Por ello, afirmó que ahora es el momento de "apoyar y estar juntos" para conseguir que en el corto plazo no se invista a "un prófugo" porque sí lo dice el reglamento y "así es la ley", subrayó el secretario general de C's.

Villegas subrayó que no ha existido ningún contacto por parte de Ciudadanos y el Gobierno en las últimas 24 horas para hablar del problema catalán.

Sobre la reunión que de los secretarios autonómicos, Villegas señaló que se han marcado los ámbitos en los que debe trabajar Ciudadanos en el 2018 para "asentar su crecimiento" porque están en la fase de "consolidar y entrar a gobernar". "Hoy más que nunca es necesario dar una alternativa a los españoles para que no tengan que elegir entre el viejo bipartidismo y aquellos que quieren romper España", remachó.

Por otra parte, el líder de CatECP, Xavier Domènech, dijo en una entrevista matinal en Catalunya Rádio que su previsión era que "lamentablemente" no se pudiera investir president a Carles Puigdemont el próximo martes.

"El dilema actual es artículo 155 o recuperación del autogobierno", comentó Domènech, quien reprochó que los partidos soberanistas polaricen el debate entorno a la figura del ex jefe del Govern: "Pensar que la única forma de salir hacia adelante pasa por un solo liderazgo es una reducción de las formas de salir de esta situación". Asimismo, criticó que ERC no ha planteado una alternativa porque tiene "miedo" a ser acusado de ser cómplice de la aplicación del 155.