Javier Arenas, ya con el simbólico cargo de presidente de honor del PP andaluz, viajó el miércoles por la noche a Cantillana para participar en un acto de homenaje y casi de despedida al alcalde, el popular Enrique Naranjo, que hizo historia en las últimas elecciones municipales colocando al PP como lista más votada. Su victoria, junto a otras, se enarboló como ejemplo del avance de la formación en la provincia. Pero año y medio después, Naranjo, con una mayoría simple que ha dificultado su gestión además, perderá la vara de mando por una moción de censura que firman el PSOE e IU. El Pleno es mañana sábado, a las 12.00, y colocará al frente del Consistorio a la socialista Ángeles García, veterana edil después de 16 años, aunque concurrió por primera vez como cabeza de cartel del PSOE en las últimas municipales.

Junto a Arenas, 300 militantes, vecinos, alcaldes populares y otros cargos públicos "arroparon" al alcalde, según el PP, calentando el ambiente de cara a una sesión que -como siempre en estos casos- generará controversia y tensión. Entre los asistentes estuvo el recién elegido presidente provincial, Juan Bueno, quien insistió en calificar de "injusta y antidemocrática" la moción. Bueno subrayó que el forzado cambio al frente del Consistorio "terminará con la rigurosidad, honestidad y la eficacia con las que ha gobernado el PP.

"Desde que los populares ganaron las pasadas elecciones municipales, los cantillaneros han comprobado cómo, a pesar de los grandes problemas que los gobiernos de izquierdas dejaron, el alcalde se ocupaba también de los pequeños problemas de sus paisanos y eso es lo que hace grande a un regidor", apuntó Bueno, quien puso el acento además en que Cantillana "se va a dar cuenta" de que el gobierno que "la izquierda ha destruido, ha ejercido su tarea de forma honesta y eficaz, y eso se va a echar de menos". Naranjo y su equipo han gobernado "pensando en los cantillaneros y no en ellos mismos, como van a hacer los del pacto de perdedores que se ha firmado en los despachos de la Junta y no pensando en Cantillana".

El presidente provincial del PP expresó todo el apoyo del partido a sus concejales y aseguró que "van a seguir escuchando los problemas de todos los ciudadanos, nos hayan votado o no, porque se va a seguir trabajando de forma seria y rigurosa". "El pacto fraguado en Cantillana es legal, pero antidemocrático; con nuestro trabajo el PP va a demostrar que la provincia tiene un futuro lleno de oportunidades".

El PSOE e IU ya gobernaron en coalición durante tres años del mandato pasado en Cantillana. Pero tras las elecciones, cuando la federación perdió un edil frente al ascenso del PP, se entendió que el pueblo había votado cambio y no se reeditó el acuerdo. La propia García, actual coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer, justificaba hace unos días la moción de censura por la falta de transparencia e información en las cuentas públicas y por el deterioro de los servicios y el empleo público que se ha producido. El cambio de gobierno es, desde su perspectiva, una cuestión de "responsabilidad" con sus vecinos.