El alcalde de Coria, Modesto González, presentó ayer junto a Joaquín Navarro Fernández, los actos organizados para rendirle homenaje. Era objetivo de los asesinos ultraderechistas de los atentados de Atocha, en 1977, y logró salvarse porque acababa de dejar el despacho de los abogados laboralistas. Nacido en Coria en 1932, en su adolescencia trabajó de barquero, como su padre. De familia muy humilde, es del menor de doce hermanos. Tras trabajar en el transporte de una fábrica de ladrillos, a los 28 años se trasladó a París y en 1961 ingresó en el PCE.

"Coria no podía dejar de rendir un homenaje a este vecino que, pese a su importancia histórica, ha pasado bastante desapercibido y es de justicia profundizar en su figura", destacó el regidor, que hizo un llamamiento a los corianos para que "participen en los actos culturales que servirán para conocer mejor una vida de lucha permanente en pro de los trabajadores".

El día 19 de febrero, a las 11:30, se presentará el libro Memorias de Joaquín Navarro. Aprendiendo de los trabajadores y una exposición con el mismo nombre. La Sala de exposiciones Martínez de León acogera la Muestra 40 Aniversario del asesinato de los abogados de Atocha, 1977-2017 con la proyección de la película Siete días de enero. Navarro, agradecido y emocionado por el homenaje, recordó la penuria económica en la que creció que le obligó a marcharse de Coria. También aportó anécdotas sobre su lucha política, laboral y sindical y sobre las dificultades que ha tenido que salvar a lo largo de su vida, detalles recogidos en la publicación y exposición que presentan el 19 de febrero.