La Policía Local de Olivares detuvo este miércoles a una mujer como presunta autora de un robo en el cementerio municipal de la localidad, del que sustrajeron de madrugada una treintena de jarrones de aluminio, utilizados para colocar flores junto a los nichos. También desaparecieron tres escaleras de metal para acceder a los nichos más altos. La detenida es una joven toxicómana de 27 años.

Los policías sospecharon de ella desde un primer momento. Al tener conocimiento del robo, los agentes montaron un dispositivo en torno a las chatarrerías de la zona, seguros de que la joven y un acompañante irían por la mañana a tratar de revender los objetos metálicos sustraídos. Los floreros de aluminio están valorados en unos 60 euros cada pareja, ya que se coloca uno a cada lado del nicho. La presunta autora del robo accedió de madrugada al cementerio y sustrajo los jarrones, dejando las flores que había en su interior esparcidas por el suelo del camposanto de Olivares.

Los agentes municipales sorprendieron a la mujer cuando llevaba la mercancía robada en el maletero de un coche, en el interior de una bolsa de gran tamaño. Todos los jarrones robados fueron recuperados, si bien la mayoría de ellos están destrozados. La Policía ha imputado en principio a la sospechosa un delito de robo con fuerza en las cosas, si bien los familiares de los difuntos también podrían ejercer acciones legales contra ella por profanación y delito contra los sentimientos religiosos. También podría imputársele un delito de receptación al propietario de la chatarrería por la compra de objetos robados.