Más de 200 alumnos de educación infantil y primaria del colegio público Juan XXIII de Castilleja de la Cuesta (Sevilla) se han ausentado de las clases para reclamar al Gobierno municipal de Carmen Tovar (PSOE) que solvente las deficiencias del centro escolar invirtiendo en su recuperación o impulsando una nueva infraestructura, pues el pasado viernes un portón de más de dos metros de alto se desplomó justo cuando los niños formaban fila para salir.

Una de las personas de la Asociación de madres y padres de alumnos (AMPA) del colegio Juan XXIII, Rocío, informó a Europa Press de que sólo cuatro de los 212 alumnos han asistido a clase debido al plante promovido por los padres a consecuencia del incidente ocurrido el pasado viernes, cuando un portón que da acceso al aula para niños de tres años cayó al suelo justo cuando los menores formaban fila para salir de clase, poco antes de que el reloj marcara las 14.00 horas.

Este incidente viene a sumarse a las deficiencias que presenta la "antiquisima" edificación, con "goteras y grietas" que han motivado que el Ayuntamiento y la Consejería de Educación planeen construir un nuevo centro, aunque "no se invierte dinero en el actual porque se va a construir el nuevo, que nunca llega".

Dado el caso, la decisión del AMPA es que los niños no asistan a clase ni hoy ni mañana y quizá tampoco lo hagan el lunes, pues pese a la visita cursada hoy al Ayuntamiento, los padres de los alumnos no han logrado reunirse con la alcaldesa. Aunque el primer teniente de alcalde y concejal de Economia y Hacienda, Recursos Humanos y Régimen Interior, Servicios y Medio Ambiente, Julio Borge, ha prometido enviar al arquitecto municipal para analizar el estado de la construcción, los padres prefieren que el edificio sea revisado por un técnico "que no barra para adentro".

Así las cosas, probablemente sea el lunes cuando se celebre la ansiada reunión con la alcaldesa, si bien existe la posibilidad de que ese día tampoco asistan a clase estos niños.