Algunos testigos del tiroteo que se produjo hoy en la localidad sevillana de El Viso del Alcor y que le ha costado la vida a un guardia de seguridad de 48 años de la empresa Prosegur, mientras que otro ha resultado herido, aseguraron haber visto a "un individuo con un casco subiéndose en una moto" de color negro y huir con otra persona del lugar de los hechos. 

En declaraciones a los periodistas, un testigo y trabajador de la zona aseguró que vio un individuo subiéndose en una moto, junto a otro que podría ser un colaborador que esperó a este sujeto hasta que consiguió apoderarse del botín. 

Por su parte, otro testigo y trabajador de la plaza de abastos donde ocurrieron los hechos afirmó que en el momento del tiroteo "hubo mucho revuelo, la gente salió corriendo" y una vez que dejaron de escucharse tiros salieron a ver qué había pasado. "Al salir vimos a los dos guardias de seguridad heridos, uno de ellos tirado en el suelo, pero no pudimos ver al agresor", manifestó este testigo. 

Asimismo, otro testigo ratificó que se escucharon varios tiros y cuando salieron a ver qué había ocurrido, vieron a un vigilante de seguridad "tirado en el suelo, con varios tiros, inconsciente y muy grave", mientras que el otro se mantenía en pie,"apoyado sobre la pared", aunque también había recibido varios tiros. 

"Salimos a socorrer a los guardias de seguridad, pero rápidamente llegaron los servicios de emergencias y la Guardia Civil", indicó este testigo, quien además añadió que "los vigilantes hacían siempre el mismo recorrido", aparcaban el furgón blindado en la puerta principal de la plaza de abastos y cruzaban hasta la calle trasera donde se encuentra la sucursal bancaria con las sacas de dinero.

Más de cuarenta agentes

Hasta El Viso del Alcor se desplazaron más de 40 agentes de la Guardia Civil para controlar las vías de salida del municipio con objeto de evitar la huida del individuo que ha disparado contra los dos guardias de seguridad. 

Los hechos ocurrieron en la calle Real del citado municipio, donde estos empleados habían estacionado un furgón blindado de seguridad destinado al traslado de grandes cantidades de dinero en una calle paralela a la de la sucursal del banco Santander. 

Los dos vigilantes habían comenzado a trasladar las sacas de dinero desde el furgón hasta las instalaciones bancarias cuando, poco antes de las 10.40 horas, irrumpió en la calle un sujeto que abrió fuego contra los guardias.