La empresa alemana de chocolates Lambertz, responsable del calendario en el que la actriz española Paz Vega aparece desnuda y ataviada sólo con una mantilla en la capilla de la patrona de Gerena, aseguró ayer que su intención no ha sido nunca "afrentar ni ultrajar" a los creyentes católicos. Lambertz respondió así, en un comunicado, a la condena de la Archidiócesis de Sevilla y su "categórica reprobación" al reportaje "erótico" protagonizado por la actriz sevillana ante la Virgen de la Encarnación.

La empresa chocolatera rechazó "firmemente" la acusación de "ofender sentimientos religiosos" con las imágenes del calendario y aseguró que las mismas fueron concebidas "siempre como un homenaje a la patria de la actriz Paz Vega y sus tradiciones".

En esta línea, recordó que el calendario, reconocido internacionalmente como un producto artístico "de alta calidad", realizó su diseño siguiendo los principios del Derecho constitucional "que garantizan la libertad artística". Al diseñar el calendario Lambertz del próximo ejercicio, añadió, "también se ha interpretado artísticamente el tema de la Carmen, que desde hace cientos de años ha sido tan versionado en forma escrita, fotográfica, cinematográfica u operística". "Las actrices como Paz Vega representan sus papeles reflejando así la imaginación del artista", subrayó la compañía, para añadir que ni ella ni los creadores del calendario realizan con ello "declaraciones religiosas ni política".

Además, subrayó que la aceptación en Alemania del almanaque ha sido "positiva" y que sus imágenes no han causado "discusiones controvertidas" ni han sido vistas como "una ofensa".

Lambertz recordó que para la grabación de las imágenes se abonó un honorario y el propietario "en ningún momento puso cortapisas, definió limitaciones ni ejecutó ningún tipo de censura. Nunca se nos hizo referencia a que el tema pudiera se delicado o causa de problemas con los fieles". "Si los responsables de la capilla nos hubieran informado de ello, hubiéramos seleccionado otra ubicación para realizar estas imágenes. Los responsables, que estuvieron presentes todo el tiempo que duraron las sesiones". El arzobispado había asegurado que el calendario se realizó "dolosamente" y "engañando a los responsables de la ermita".

No obstante, la empresa dejó constancia de que Vega ha sido "totalmente ajena" a la elección y contratación del lugar para las fotos.