La situación saneada de las cuentas del Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla permitirá al Consistorio invertir buena parte de los más de 800.000 euros de ahorro que acumula en su presupuesto. Y la partida más importante, 150.000 euros, se ha reservado para la adquisición de la finca en la que se ubica el llamado Castillo de Luna, como se conoce a la fortaleza, de la que sólo quedan ya restos, que da origen a la localidad de la Campiña y que nunca ha sido objeto de una investigación arqueológica y científica en profundidad.

Según el alcalde, Antonio Martín (IU), la idea es que, una vez cerrado el acuerdo con la familia propietaria, que tiene predisposición para vender, firmar convenios con universidades e impulsar esos estudios que están pendientes, para poner el enclave en valor. La construcción está en ruinas, pero según el edil, no ha sido objeto de expolios. La adquisición de la finca, que tiene 20 hectáreas y que llega también al río Corbones, permitirá además aprovechar esa zona de ribera para habilitar un lugar de recreo para los vecinos.

Se trata de una de las tres propuestas de inversión a cuenta del superávit que el Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla podrá realizar este año, como ha ocurrido con el superávit de la Diputación de Sevilla, gracias a la excepción que el Gobierno central ha hecho para que los entes locales que están saneados puedan usar ese dinero que ahorran, aunque siempre en inversiones que ha definido como "sostenibles", lo que implica que deben tener una vida útil de más de cinco años y no crear puestos de trabajo estructurales en la entidad pública.

En el caso de este municipio de 11.500 vecinos, el límite que tenía en ese sentido es el techo de gasto en su presupuesto, que impone la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera que se aprobó en 2012 a todos los ayuntamientos. Porque, a diferencia de otros, no tiene ningún tipo de crédito, que por esa misma ley tienen prioridad de pago y a él debe destinarse el superávit. Es, además, uno de los pocos pueblos de Sevilla que no ha tenido que acogerse al plan de pago a proveedores.

Así, la adquisición de esta finca de suelo no urbanizable en la que se ubica su castillo -la que fue alcazaba romana, de la que derivó Cazalla- no es la única inversión que podrá afrontar este año. También destinará 120.000 euros al arreglo de caminos que favorezcan la actividad ganadera y la agrícola y ha reservado otros 120.000 para adquirir al menos uno de los dos molinos protegidos que existen en el casco urbano. El alcalde destaca que el Ayuntamiento no tiene ningún edificio singular en la actualidad. En total y según la propuesta que se aprobó en el Pleno el pasado 17 de marzo y que es firme al haberse superado el periodo de alegaciones, el Consistorio invertirá 420.000 euros del superávit, menos de la mitad, con lo que podrá incorporar nuevas partidas con modificaciones presupuestarias si es necesario.

Expropiación a la Junta para la estación 

El Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla ha iniciado un procedimiento de expropiación forzosa para hacerse con la parcela en la que está previsto que se construya desde hace años la estación de autobuses, tal y como recoge el PGOU. Se trata de los 2.800 metros que pertenecían a la Cámara Agraria Provincial y que pasaron a ser propiedad de la Administración autonómica. Tras una primera propuesta de compra por parte del Ayuntamiento, que no ha tenido respuesta, el regidor ha decidido dar el paso de expropiar, para no dilatar más el proceso, aunque insiste en que todavía es posible llegar a un acuerdo. Antonio Martín recuerda, en este sentido, que las calles adyacentes ya se han adecuado para ubicar en ese lugar la terminal de autobuses, junto a la carretera que conecta con la autovía A-92. Incluso se hizo una rotonda para facilitar el acceso. El proyecto no se ha completado porque el Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla no es todavía el titular de la finca.