Los colectivos vecinales de Montequinto consideran que la Junta miente y que no pretende soterrar la A-376 a su paso por la barriada nazarena, sino sólo el nudo viario de acceso. Es la reacción de los residentes al acuerdo firmado ayer entre la Consejería de Obras Públicas y los tres grandes ayuntamientos del área metropolitana (Sevilla, Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra) para convertir en bulevar el tramo urbano de la A-376 y soterrar una parte de este tramo de la autovía.

El objetivo del convenio es reordenar el tráfico y convertir en bulevar la parte de la A-376 que discurre entre la SE-30 y la futura SE-40. El proyecto estará listo en 2011 e incluirá el soterramiento de una parte de la vía entre Montequinto y Condequinto. La inversión roza los 12 millones de euros. Sin embargo, los vecinos advierten que el protocolo anunciado por la Junta no recoge ninguna de sus demandas y aseguran que no han sido informados en ningún momento. "Es exactamente lo mismo que defendió el PSOE en el Parlamento, la depresión y el soterramiento del nudo de comunicación de las barriadas: 30 metros", aseguró el presidente del colectivo vecinal de Condequinto, Javier Florindo.

Según explicó la consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, una vez se ponga en servicio la SE-40, la A-376 pasará a canalizar sobre todo el tráfico urbano y metropolitano, con lo que se diseñará en forma de bulevar e integrará paseos peatonales, carril bici y plataformas reservadas para transporte público, con accesos e intermodalidad en las estaciones de la Línea 1 de metro y del tren cercanías. El acuerdo mediante el cual los ayuntamientos se comprometen a reservar los suelos que hagan falta permitirá además facilitar los accesos y disuadir de altas velocidades, propiciando un tráfico más "amable". El soterramiento, asimismo, redundaría en beneficio de la conexión de las zonas de Montequinto y Condequinto con el gran núcleo urbano de Dos Hermanas. Para ello, Gutiérrez desveló que la Consejería quiere tener listos los proyectos constructivos a finales de 2008, con un coste de unos 12 millones de euros, de los que algo más de cuatro irían al soterramiento, cuyas obras de ejecución tardarían, inicialmente, unos dos años.

Según la titular de Obras Públicas, esta actuación permitirá la mejor integración de las barriadas nazarenas de Montequinto y Condequinto y el acceso permanentemente a las estaciones de la línea 1 del Metro ubicadas en Montequinto y la Universidad Pablo de Olavide.

Ayer también se firmó otro acuerdo entre estas tres administraciones locales y la autonómica va enfocado a la promoción de viviendas protegidas, con el objetivo de que en los próximos cuatro años se inicien las iniciativas suficientes para satisfacer la demanda de la próxima década. Así, en Sevilla se prevé una demanda de 25.000 viviendas protegidas; de 4.500, en Dos Hermanas; y de casi 3.000 en Alcalá, por lo que el acuerdo permitirá, según la titular de Obras Públicas y Transportes, otorgar a los ayuntamientos y a los promotores privados herramientas para poder urbanizar suelos para la construcción. Sevilla prevé iniciar 23.000 viviendas protegidas en el periodo 2008-2012, mientras que Dos Hermanas comenzará 10.000 y Alcalá 3.600.

La Junta ampliará las ayudas al aportar mediante la Empresa Pública del Suelo de Andalucía 3.000 euros para subvencionar los gastos de urbanización de aquellas viviendas entre 70 y 80 metros cuadrados que cuesten menos de 90.000 euros, destinadas a aquellas familias con índices inferiores a 2,5 por debajo del salario mínimo. En los próximos días estos acuerdos puedan extenderse a otras localidades.

Tras la firma del acuerdo, Monteseirín reivindicó las actuaciones de crecimiento moderado y recordó que en años anteriores, con un gobierno de derechas, "se expulsaba de Sevilla a todos aquellos que no tenían un alto poder adquisitivo" y destacó el esfuerzo "sobrehumano" que hicieron varios ayuntamientos como el de La Rinconada, Alcalá o Dos Hermanas para acoger a estos ciudadanos.