El antiguo monasterio de la Victoria, en la calle Carretas esquina con la Plaza Madre Loreto, junto a la Iglesia Conventual, vuelve a la actualidad con el enésimo proyecto para el futuro del edificio: un hotel.

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Puerto Real se ha marcado como objetivo atraer inversores hoteleros al centro de la localidad. En ello están trabajando de la mano los ediles de Turismo y Urbanismo, Alfredo Charques y Antonio Villalpando, ambos de Equo. Fue uno de los objetivos con los que la ciudad acudió a la Feria Internacional de Turismo (Fitur) el pasado enero y allí se produjeron algunos contactos en este sentido. Incluso a quienes se han interesado por algunas parcelas en los alrededores de la ciudad para proyectos turísticos, se le has puesto en bandeja de la plata la opción de apostar por el centro con edificios singulares como el antiguo convento.

Hasta el momento se han iniciado conversaciones con al menos dos grupos hoteleros de reconocida solvencia que han visto con buenos ojos la puesta en valor del antiguo hospital del monasterio de la Victoria (S. XVII), que se encuentra en desuso desde que en febrero de 2002 se trasladase la residencia Vedruna al nuevo edificio que ahora ocupa.

Una de las empresas interesadas ya ha estado en la zona realizando mediciones y valorando el estado del edificio; y ahora "hace números" para ver la viabilidad del proyecto.

La propuesta del Ayuntamiento, propietario del edificio, es realizar una concesión de su uso "por un tiempo largo" que dependerá de la inversión que la empresa deba hacer para su puesta a punto y de los empleos que genere. Se baraja la posibilidad de que se convierta en un hotel balneario de cuatro o cinco estrellas.

Con proyectos como éste se pretende que cambie el perfil del turista que visita la localidad, ya que la mayoría de ellos no llega a pernoctar en la ciudad por la falta de oferta hotelera, y los que lo hacen se alojan en la periferia usando la ciudad como base para conocer la provincia.

"Hay que atraer hoteles al centro y en edificios singulares sería una magnífica opción", dice Antonio Villalpando. El edil también ve interesante la posibilidad de que algunas de las "casas grandes que hay por el centro se puedan transformar en hoteles pequeños, de unas 20 habitaciones. Pero para eso es necesario la inversión privada", apunta.