El vestuario sabe que el encuentro ante el Leganés de este domingo es importante. Comenzar el año con una victoria ayudaría a olvidar la dolorosa eliminación, por la forma, de la Copa del Rey y ayudaría a los verdiblancos a recuperar sensaciones de cara al resto de la temporada.

Para ello, el equipo bético volverá a contrar con la afición, su fiel aliada. Y es que desde la llegada de Víctor, el Benito Villamarín no ha visto a los suyos perder. Cuatro encuentros con el técnico madrileño al frente -tres de Liga y uno de Copa- en los que los verdiblancos han sumado tres triunfos y un empate. Una racha a la que pretenden dar continuidad ante el Leganés.

Sin embargo, el equipo pepinero no es el más cómodo para los verdiblancos, que todavía no han sido capaces de ganarle en lo que va de siglo. Sin ir más lejos, el pasado año, en Segunda División, los madrileños pintaron la cara a los béticos, enmudenciendo el estadio con un 1-3 pese a estar gran parte del partido con uno menos sobre el césped.

No obstante, los béticos confían en que esta vez sea diferente. En el primer duelo que enfrenta a ambos en la máxima categoría del fútbol español, los pupilos de Víctor confían en dar el do de pecho para conseguir un importante triunfo ante un equipo que acumula seis partidos consecutivos sin ganar, siendo tres de ellos empates, y que parece haberse desinflado en las últimas jornadas tras un buen y soprendente inicio de competición.

Una victoria, además, serviría para volver a ganar en el primer partido del año, algo que no ocurre desde hace cuatro años atrás.