Rubén Castro recuperó la sonrisa ante el Eibar, aunque su postrero gol apenas sirvió para maquillar el resultado. Nueve jornadas sin marcar, la segunda peor racha en el Betis, son demasiadas para un goleador como el canario, que ahora tiene el reto de celebrar un gol en el Benito Villamarín, algo que no realiza desde el último partido de la pasada temporada ante el Getafe. Los cinco goles que ha anotado en esta Liga fueron a domicilio -dobletes ante Barcelona y Valencia, y el tanto en Éibar-, una circunstancia que no le había ocurrido nunca en el Betis a estas alturas de un campeonato.
De las 68 dianas que Rubén Castro ha conseguido con el cuadro verdiblanco en la máxima categoría, 32 fueron como local. Hasta esta temporada, más de la mitad de los goles del delantero habían llegado en Heliópolis -32 sobre 63-, una constante cada año en los que sus tantos se han repartido casi al mismo porcentaje tanto en casa como fuera.
El mal juego del Betis en el Villamarín y su posicionamiento en la banda izquierda por parte de Gustavo Poyet han sido factores que han jugado en contra de los habituales números del canario y que han provocado esa sequía goleadora como local.
En la temporada 2011-12, la primera con el Betis en la máxima categoría, Rubén Castro anotó 9 de sus 16 tantos en Heliópolis. Eso sí, a estas alturas de la temporada sólo acumulaba uno, después de haberse perdido algunos encuentros por lesión; al año siguiente, el canario anotó otra vez 9 goles en el Benito Villamarín de los 18 con los que finalizó el campeonato, mientras que en las 13 primeras jornadas ya había anotado dos; en la temporada 2013-14, en la que sufrió una grave lesión que lo tuvo apartado hasta finales de noviembre, Rubén marcó 10 tantos en la Liga, siendo la mitad de ellos como local e incluso a estas alturas acumulaba uno que había logrado en la segunda jornada del campeonato cuando tuvo una efímera reaparición; en la pasada Liga, Rubén batió su registro como goleador en el Betis en Primera con 19 dianas, de las que nueve las logró en Heliópolis.
En Segunda División, la importancia de sus goles como local incluso fue mayor, siendo una pieza clave en ambos ascensos de categoría. En su estreno como verdiblanco, en la temporada 2010-11, el atacante consiguió anotar 27 goles, de los que 14 fueron en el Villamarín; en la 2014-15, el canario se superaría con 32 dianas, de las que 21 las anotó en casa.
Seis encuentros acumula el Betis en Heliópolis en esta temporada y, hasta el momento, a Rubén Castro apenas se le contabiliza una asistencia de gol, la que facilitó el 1-2 de Álex Alegría ante el Granada. Deportivo, Málaga, Real Madrid, Espanyol y Las Palmas, además del cuadro nazarí, han pasado ya por el campo del equipo verdiblanco, sin que el mejor goleador bético de siempre se haya estrenado.
Si el plan de Víctor no sufre cambios de última hora, Rubén Castro formará pareja de ataque junto a Joaquín, el segundo máximo realizador del equipo, dentro de ese 5-3-2 con el que viene trabajando el madrileño. Sanabria, que anotó ante el Deportivo en la Copa del Rey su primer gol como bético, tendrá que esperar su oportunidad desde el banquillo. Ahora es el turno de Rubén, del que los aficionados aguardan ya una celebración con los suyos.
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