Los recortes provocados por las crisis están haciendo que se interrumpan muchos programas sociales, desde la aplicación de la Ley de Dependencia a todo tipo de ayudas a los más desfavorecidos. En este contexto, las fundaciones privadas pueden jugar un papel determinante a la hora de mantener las ayudas asociadas al estado del bienestar. Existen muchos nombres asociados a grandes empresas empiezan a estar más presentes en las secciones de sociedad de periódicos e informativos que en las de Economía.

La última entidad en presentar sus planes para este año en materia social ha sido la Fundación Mapfre, que se define a sí misma como una "institución no lucrativa cuya finalidad es devolver a la sociedad parte de los beneficios obtenidos en la actividad empresarial de Mapfre, mediante acciones de interés general que contribuyan al bienestar de las personas, con especial atención a los menos favorecidos".

A pesar de que esta entidad sea quizás más conocida por su actividad cultural -su sede del madrileño Paseo de Recoletos acoge ahora mismo una de las retrospectivas más completas de pintura impresionista-, su acción social ha sido intensa en los últimos años, una tendencia que se repite en este 2013 y que aumenta, incluso, su presupuesto, de 51,8 millones de euros a 55. Las ayudas a los desempleados, que este año ascienden a 600, son unas de las más destacadas por los responsables de la Fundación. Se ofrecen en forma de practicas remuneradas para jóvenes de todos los ámbitos.

No se trata pues de premiar la excelencia, como hacen otro tipo de programas, sino de ayudar a los que lo tienen más difícil. A este proyecto lo han denominado Accedemos, ya que se trata de una herramienta de entrada al mercado laboral. Los seleccionados para hacer prácticas recibirán 500 euros mensuales durante seis meses.

También pensando en los jóvenes, la Fundación ha creado una web que formará en habilidades sociales, para lo que cuentan con la colaboración de la divulgadora Elsa Punset.

La Fundación también lleva a cabo este año acciones de promoción de la salud, especialmente dirigidos a "los más vulnerables de la sociedad", niños y mayores. Así, la campaña "Con mayor cuidado" pretende prevenir los accidentes por caídas de las personas mayores. Como acciones concretas, este año se llevarán a cabo dos estudios que pueden facilitar pistas sobre acciones futuras. En concreto, uno de ellos analizará las lesiones en el deporte de ocio y otro la respuesta de la sociedad española ante el cambio climático.

La ciencia más pura también tiene hueco en la acción social de esta fundación, como en la de otras similares. En mayo convocarán sus ayudas a la investigación, dotadas con 1,3 millones de euros a 84 proyectos que se conocerán a final de año.