Los hermanos de los Gitanos están llamados el próximo día 12 a un cabildo extraordinario en el que se someterán a votación las nuevas reglas de la corporación. En este proyecto, que la corporación colgó en su web el pasado día 30 para que los hermanos lo pudieran consultar, se regula por primera vez en su historia que un hermano que no sea de raza gitana pueda presentarse como candidato a hermano mayor, cuando ningún miembro de raza gitana haya obtenido el consenso necesario que se traduce en el aval de al menos el 3% del censo electoral, como se establece por primera vez en esta nueva normativa.

Monseñor Asenjo fue preguntado sobre esta cuestión al término de la inauguración de la exposición sobre la restauración de la tabla de San Roque, obra de Hernando de Esturmio, que se puede visitar en el convento de Santa Clara. El arzobispo se mostró prudente, aunque abogó por la igualdad de derechos: "Si es la hermandad de los Gitanos hasta cierto punto es lógico que el hermano mayor sea gitano. Pero si también hay payos admitidos en la hermandad, lo normal es que gocen de los mismos derechos que los gitanos". El teniente de hermano mayor de los Gitanos, Carlos de Paz, justificaba de este modo esta modificación de los requisitos para acceder a la vara dorada: "El proyecto de reforma de reglas apuesta por una solución de consenso entre las diferentes sensibilidades que permite conservar una tradición histórica de nuestra corporación desde sus orígenes fundacionales, pero a su vez establece los mecanismos para que, llegado el caso, seamos los hermanos lo que determinemos de manera natural cuándo se dan las circunstancias adecuadas para que dicha tradición finalice".

Por otra parte, Asenjo justificó el decreto por el que se "disciplinan" las salidas extraordinarias "por la multiplicación excesiva de las solicitudes en los últimos años". Preguntado sobre las dos que hay previstas para este año, la Hiniesta y Pasión, remitió directamente al contenido de la norma con la frase: "El decreto entra hoy en vigor".