El juicio a un hombre de 65 años acusado de abusar sexualmente de su nieta durante años con el supuesto consentimiento de la propia madre de la menor ha sido aplazado hasta el próximo 10 de marzo por incomparecencia de la madre de la menor, confirmaron fuentes judiciales.

En la nueva vista oral prevista para marzo, el fiscal, que pide ocho años para el abuelo y la madre de la pequeña, defenderá que el procesado supuestamente sometía a tocamientos a su nieta, ahora una niña de 13 años, desde hacía un par de años, sobre todo durante las vacaciones escolares, ya que la menor acudía a la vivienda que su abuelo tenía en la localidad gaditana de Ubrique. Asimismo, el fiscal entiende que el inculpado cometía los mismos abusos cuando iba de visita al domicilio habitual de la menor, en Dos Hermanas.

Así las cosas, el Ministerio Fiscal mantiene que la hija del acusado y madre de la víctima era plenamente consciente de los abusos, hasta el punto de que los consentía y los facilitaba ausentándose durante horas de su domicilio, dejando a su padre a solas con su hija. En esos momentos en los que víctima y acusado estaban solos, prosigue el fiscal, se producían los abusos.

El Ministerio Público considera que los hechos relatados son constitutivos de un delito continuado de abusos sexuales, por lo que reclama ocho años de prisión para el abuelo y la madre de la pequeña, así como la pena adicional para la madre de inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad durante seis años. Del mismo modo, el fiscal pide que los procesados indemnicen a la pequeña en la cantidad de 130.000 euros por los daños morales causados.