Los hermanos de la Amargura deciden mañana quién regirá el destino de la corporación del Domingo de Ramos los próximos cuatro años. Unos 2.000 hermanos están convocados a cabildo de elecciones que se celebrará en las dependencias de la hermandad -anexas a la iglesia de San Juan de la Palma- de 18:30 a 22:00.

A esta cita concurren dos candidatos: Nicolás Ollero y José Luis del Pueyo, que proceden de dos sagas familiares vinculadas históricamente con la hermandad. Los dos aspirantes han ocupado distintos cargos en anteriores juntas de gobierno. Ollero ha sido fiscal, consiliario y promotor sacramental. Actualmente es camarero del Señor del Silencio y monitor de formación.

José Luis del Pueyo ha ostentado también diversos cargos, entre los que destacan los de archivero, prioste y mayodormo. Esta última función la ha desempeñado en la junta de gobierno que hasta ahora ha comandado Fernando Peinado.

Los dos apuestan por fomentar la convivencia y la participación de los hermanos. Coinciden en que la configuración actual del Domingo de Ramos es mejorable y hay que analizar otras alternativas. Defienden el carácter abierto de la hermandad y el estilo que ha perpetuado a lo largo de los años. Para los dos, la mayor amenaza de las cofradías es la pérdida de su referente religioso.

NICOLÁS OLLERO
1. ¿Por qué se presenta a hermano mayor? He vivido de cerca la actividad de la hermandad en los últimos 30 años, conociendo sus problemas y sus posibles soluciones, y creo poder ser útil a la corporación en este servicio, dispongo de tiempo, y un grupo de hermanos piensa que debo asumir esta responsabilidad.

2. Cite dos de los principales proyectos que defiende ejecutar si resulta elegido. El compromiso fundamental es la convivencia y participación de los hermanos a todos los niveles. Por tanto, pensamos activar todos los mecanismos de comunicación. Éste es el proyecto principal. También queremos reactivar la vida diaria de la hermandad con días de convivencia. Además, tenemos previsto realizar una gestión adecuada sobre el patrimonio, restaurando y completando el mismo.

3. ¿Considera necesaria alguna reforma en la configuración del actual Domigo de Ramos? Como nazareno he vivido otros tiempos con menos dificultades horarias. Ahora la cofradía entra muy tarde, teniendo en cuenta que el día siguiente es laborable. Es posible que en el futuro pueda plantearse un Domingo de Ramos distinto, pero son los hermanos los primeros que tendrían que autorizar cualquier cambio.

4. ¿Comparte la percepción generalizada sobre el carácter cerrado de la hermandad? No lo comparto y es es una percepción que no se ajusta a la realidad. Creo que la corporación colabora con otras instituciones siempre que puede, e intenta, a veces sin conseguirlo, acercarse al barrio. Nos sigue pesando el que nos consideren una hermandad elitista por el alto nivel de la cofradía y que puede generar algo de recelo en los demás.

5. ¿Es partidario de que la calle Santa Ángela de la Cruz continúe aforada para el público cuando transcurre por ella la cofradía? Se ha pasado de un extremo al otro, de pasar con la calle llena de coches aparcados y sin presencia de fuerza pública a no dejar entrar a nadie. Creo que lo prudente en los sitios conflictivos es prepararlos para que no se produzcan situaciones no deseadas. Con la calle sin vehículos, colocando al público adecuadamente en la puerta del Convento, la cofradía pasa sin dificultad especial.

6. ¿Cuáles son, en su opinión, los enemigos actuales de las cofradías en general? El principal enemigo de las hermandades es la pérdida de la propia identidad. Somos instituciones de la Iglesia y un medio para mejorar como personas y cristianos, y en ocasiones perdemos esta perspectiva. En cuanto a la cofradía, el enemigo es la propia corporación, que puede tener una idea equivocada del lucimiento a ultranza sin tener en cuenta las circunstancias de cada momento, y pierde el verdadero sentido de la estación de penitencia. No podemos olvidarnos de que se trata de un culto externo y el orden, la compostura, y el saber hacer son fundamentales. Por otro lado, el público que sólo ve la cofradía como un espectáculo y que no la respeta.

7. ¿Contempla alguna reforma que conlleve el cambio estético de la cofradía en la calle? Poca reforma necesita nuestra estación de penitencia, pues su estilo está consolidado. Hay cierta disparad de criterio sobre el mejor itinerario, pero este es un tema que decidirán, como es lógico, en el cabildo general de salida.

JOSÉ LUIS PUEYO
1. ¿Por qué se presenta a hermano mayor? He formado parte del equipo que ha animado la hermandad en los dos últimos mandatos. Durante los mismos nos hemos esforzado mucho en propiciar un clima de cordial acogida para convertir la iglesia de San Juan de la Palma en centro adecuado para la celebración y profundización de nuestra religiosidad. La ilusión de todos por continuar en esa línea me ha motivado a ofrecerme a encabezar el equipo.

2. Cite dos de los principales proyectos que defiende ejecutar si resulta elegido. Diría que hay un proyecto con muchas líneas de actuación. Entre estas líneas se encuentra la de promover en San Juan de la Palma una comunidad, que día a día participe en los cultos, en la formación y en la ayuda a los demás, prestando especialísima atención a los niños. Otro de nuestros proyectos es aprovechar los distintos grupos existentes y crear otros nuevos para desarrollar distintas actividades sociales y asistenciales.

3. ¿Considera necesaria alguna reforma en la configuración del actual Domigo de Ramos?  El día es muy complicado con horarios e itinerarios muy ajustados para todas las hermandades, por lo que habrá que seguir valorando y consensuando las posibilidades que permitan que la jornada se desarrolle mejor aún de lo que actualmente lo hace. Con todo, la colaboración entre las distintas hermandades del día es extraordinaria.

4. ¿Comparte la percepción generalizada sobre el carácter cerrado de la hermandad?  No conozco esa hermandad a la que hace referencia. La nuestra tiene las puertas abiertas durante todo el año; a los niños para sus fiestas con payasos, a los tres grupos de formación, a los de animación litúrgica, a monitores de acción social, a investigadores, a los que limpian plata o vienen a coser o a pasar un rato entretenido en el bar muchos sábados o muchos jueves.

5. ¿Es partidario de que la calle Santa Ángela de la Cruz continúe aforada para el público cuando transcurre por ella la cofradía?  La fórmula de este último año, con un aforamiento parcial sólo en la puerta del convento y un retén de policía en la calle para evitar aglomeraciones y que pueda discurrir la cofradía, fue bastante aceptable.

6. ¿Cuáles son, en su opinión, los enemigos actuales de las cofradías en general? Olvidar su origen y su fin fundamental de expresión religiosa. Olvidar a los nazarenos, a los hermanos que en procesión tributan ese culto y dan razón de ser a cada cofradía. Otro de los problemas comunes que se generan es dar más importancia al fenómeno estético, económico y cultural que las cofradías han generado que a su propio fin.

7. ¿Contempla alguna reforma que conlleve el cambio estético de la cofradía en la calle? El cambio es consustancial con lo vivo, y las cofradías como sus hermandades son algo vivo. Cada año la cofradía no es la reproducción de una foto amarilla , sino una celebración en la que con la participación de cada uno de nosotros vamos actualizando poco a poco, con amoroso respeto, el legado espiritual y material de nuestros antecesores.