El Ayuntamiento de Sevilla ha cerrado ya un acuerdo con un pool de tres entidades bancarias que permitirá a la Hacienda Local ahorrar hasta 41 millones de euros de aquí al final del mandato en amortizaciones e intereses de los préstamos que tiene suscrito la corporación hispalense por valor superior a 400 millones de euros.

El acuerdo, que se elevará la próxima semana a Pleno municipal, permitirá cerrar esta operación de ingeniería financiera antes de que concluya el mes de julio sobre la base de una premisa simple y muy extendida ahora, en tiempos de crisis, por el mercado publicitario: la unificación de todas las deudas.

Eso es lo que ha hecho la Delegación Municipal de Hacienda que dirige el socialista Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, y que se traducirá en la reagrupación en un solo crédito de las 49 operaciones crediticias que adeuda la Corporación municipal de Sevilla con un total de 13 entidades bancarias diferentes y que, hasta este año, suponía una carga anual superior a los 66,8 millones de euros contando amortizaciones e intereses.

Cuando se rubrique la operación con el pool de bancos seleccionado -BBVA, Dexia Sabadell y Banco de Crédito Local- el nominal vivo del único préstamo que deberá atender el Consistorio será de 419,7 millones de euros, un crédito unitario con un plazo de amortización total de 20 años -comenzará el 31 de julio de este año y se extenderá hasta la misma fecha de 2028- exento de carencia y de comisión de refinanciación. Se vuelcan ahí los 49 créditos suscritos por diversas áreas del gobierno local -sin contar empresas municipales ni organismos autónomos- por un importe total de 422 millones de euros a fecha del 3 de junio y con un vencimiento medio de siete años y medio.

Las condiciones del préstamo conseguidas por el Ayuntamiento consiguen, con mucho, mejorar las de cualquiera de los 49 créditos suscritos individualmente y, también, las que se manejan en las operaciones de financiación de grandes proyectos e infraestructuras.

Un ejemplo palmario. Del tipo de interés del 5,01% que tienen de media los préstamos firmados se pasará a un fijo para los próximos tres años que oscilará entre el 0,75% y el 2% en función de los dos paquetes de refinanciación de deuda en que se dividirá la operación. Mandato municipal, de un lado, y ciclo de desaceleración económica, de otro, serán afrontados por la Corporación con un nuevo escenario financiero que ayudará a sanear las arcas municipales y que será imprescindible tanto para afrontar los pagos de los gastos corrientes y nóminas del personal como para sacar adelante las inversiones programadas en un ciclo de recesión de dos años en los que los ingresos municipales vía tributos mermarán considerablemente.

La propuesta de refinanciación de la deuda que el delegado de Presidencia y Hacienda llevará a pleno el próximo viernes 18 de julio reestructura las operaciones crediticias anteriores de la siguiente forma. Se amplía a 20 años el plazo de todo el endeudamiento, sin carencia, mediante cuotas de amortización trimestrales constantes.

El planteamiento inicial permite reducir sustancialmente el tipo de interés durante los 10 primeros trimestres, lo que coincide con el tiempo que resta del presente mandato municipal antes de los próximos comicios municipales (hasta finales de enero de 2011).

Así, el 75% de la deuda total (alrededor de 305 millones de euros) tendrá un interés del 1,25% los cinco primeros trimestres y del 0,75% los cinco restantes.

De otro lado, el 25% de la deuda restante (115 millones de euros) se activará en función del interés del gobierno local, ya que incluye los mejores créditos obtenidos por la Hacienda Local a los intereses más bajos con un reducido grupo de entidades bancarias. En cualquier caso, las condiciones pactadas para esta porción de deuda durante los próximos tres años incluye un tipo fijo del 2%.

Estas extraordinarias condiciones de financiación obtenidas por el Consistorio, empero, tienen fecha de caducidad a final de mandato. Será entonces cuando entren en vigor nuevos tipos de intereses, plazos y cláusulas que marcarán el devenir de la Hacienda Local de las futuras corporaciones municipales.

En cualquier caso, la delegación competente insiste en que las condiciones impuestas por los bancos -y que deberá asumir el Consistorio- pasan por fijar un tipo de interés del 4,85% para las tres cuartas partes de la deuda a partir de 2011 sujeto a una cláusula de penalización.

Ésta consiste en una subida adicional de un 3% -lo que elevaría el techo del interés a un máximo del 8,1%- en caso de que la curva de los intereses a 30 años sea inferior de la curva de tipos a 10 años, y también que el tipo a 10 años sea mayor del 6%. El riesgo de que en los próximos 20 años acontezca el escenario descrito por la cláusula es "muy bajo", según fuentes de la Delegación de Hacienda, y sólo si se cumpliera en más de tres períodos trianuales se estaría peor que en una opción sin condición.

La mayor bonificación, en suma, se logra asumiendo un "determinado riesgo" que, aducen desde Hacienda, aprovecha que la situación actual de la curva de tipos es prácticamente plana y que se ha pactado un "reseteo" cada tres años.

El 25% restante de la deuda municipal afrontaría una condiciones similares a partir de 2011, aunque con un tipo fijo de interés del 6,6% y una penalización de un 1,05% más en el peor escenario posible.

La Delegación de Hacienda adujo en junio pasado que ensayará primero el agrupamiento de créditos de la Corporación local para obtener mejores condiciones e intereses más bajos para abordar en un futuro próximo la unificación de créditos de las empresas municipales a través de la Agrupación de Interés Económico (AIE) del Ayuntamiento que dirige Manuel Marchena.