El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, apostó ayer por analizar nuevas medidas para atajar los "recurrentes incidentes" que se producen en el aeropuerto de San Pablo, algo de lo que ya ha hablado con los taxistas y con quienes prestan diferentes servicios en la zona, como las agencias, dejando claro que no se encuentra satisfecho con las condiciones de "seguridad, tranquilidad y de orden que tiene que haber".

Espadas afirmó que "no se acaba de llegar a una situación de normalidad" en el aeropuerto como le gustaría, ya que "sigue habiendo incidentes puntuales". Recuerda que en Semana Santa ya se han tomado medidas concretas, pero "hay que sentarse a analizar nuevas medidas".

El primer edil hispalense señaló que se ha reforzado la seguridad, se ha hablado con los taxistas, con las agencias y con "todos aquellos que prestan servicios en el aeropuerto". "El delegado de Seguridad, Juan Carlos Cabrera, lo tiene muy claro y lo respaldo, porque tenemos que mejorar la situación, al ser el escaparate de la ciudad y punto de llegada de turistas", insistió el regidor.

En este sentido, Espadas consideró que no está satisfecho todavía con el servicio que se está prestando y con las condiciones de "seguridad, tranquilidad y de orden que tiene que haber". Apostó por mejorar la situación y aseguró que, "si hay que poner más medios, se pondrán y, si hay que acordar con todos los agentes en juego revisar cómo se está funcionando y cómo se tiene que comportar cada cual, pues lo haremos".